Frente a la pandemia de COVID-19, una de las principales razones por las que los gobiernos de casi todo el mundo han decidido poner en marcha medidas de aislamiento social como la cuarentena es por la insuficiencia de clínicas para atender a las personas infectadas, ya que la infraestructura hospitalaria dedicada a esta atención puede verse rebasada.
Uno de los casos más sobresalientes de este modelo de construcción se dio en Wuhan, China —donde fue el brote de la cepa 19 del Coronavirus—. La noticia dio la vuelta al mundo: en tan solo 10 días armaron un hospital dedicado a la atención del brote. La velocidad de construcción se debió al empleo de elementos prefabricados y contenedores.