Cuando se trata de hacer evaluaciones, verifica cómo las has hecho con las personas que te agradan y asegúrate de seguir el mismo enfoque con la persona que no te gusta, dice Hedges.
Y si es de ayuda, también puedes consultar confidencialmente con un líder en recursos humanos, que puede ofrecer una perspectiva útil y otras herramientas para ayudarte a mantener la relación en el camino correcto.
Date cuenta de que tienes que cambiar
Como líder, tienes la responsabilidad de garantizar una relación funcional con cada miembro de tu equipo.
“Un gerente no puede decir: 'Esta persona hace que mi vida sea un infierno'. Debes lidiar con ellos de manera profesional y dejar tus conflictos personales en la puerta”, aconseja LaToi Mayo, socia de la firma de abogados laborales Littler Mendelson. “ Eres responsable de establecer el tono profesional ”.
Daskal recuerda cuando trabajó con un cliente que estaba desquiciándose por un subordinado que hablaba sin cesar. Entonces ella le recomendó que cambiara su enfoque. Ahora él interrumpe al empleado y le dice: “Esa es una idea brillante. ¿Puedo hacer una pregunta?”
Al hacerle un cumplido al empleado, eso lo detiene en seco y abre la puerta a un diálogo, dice.
Hedges también recomienda sentir curiosidad por las personas que te desagradan. Pregúntales sobre sus vidas. Eso puede arrojar luz sobre las comportamientos o actitudes que te molestan.
También puedes encontrar “una pepita de oro de cosas en común” con ellos, menciona Hedges. “Y eso podría ablandar tu punto de vista”.