Más de 6,000 personas trabajan en la planta A1 de la firma automotriz Nissan, en Aguascalientes. A diario fabrican 1,330 vehículos, es decir, 65 automóviles por hora. Una unidad cada 55 segundos.
Es una labor que requiere capacitación constante y mucha organización. Ya sea en el área de motores, carrocerías, pintura, ensambles o estamapado, cada colaborador sabe cuál es su función, sobre todo cuando la planta inicia una nueva línea de producción.
Ocurrió recientemente. Para producir al día 410 unidades del Versa 2020, el fabricante acondicionó sus áreas, con una inversión de 83 millones de dólares. También reprogramó 354 robots y capacitó al talento para que pudiera cumplir con los procesos de manufactura con ayuda de la tecnología.
“Tanto humanos como robots trabajaron en conjunto para acondicionar el modelo con 11 tecnologías enfocadas en asistencia, movilidad y conectividad. Las plantas que tenemos en México compiten con las de Japón y China. Tenemos el personal y la tecnología para fabricar los autos que demanda el mercado internacional”, comenta Armando Ávila, VP de Manufactura en Nissan Mexicana.
Al igual que la automotriz, hay empresas de diferentes sectores que están invirtiendo en tecnología avanzada. No obstante, en México permea la falta de estrategias laborales para desarrollar habilidades tecnológicas en los colaboradores.
En la séptima edición del Índice Global de Competitividad de Talento (GTCI) 2020, realizado en conjunto por la empresa de Recursos Humanos Adecco, la tecnológica Google y la escuela de negocios INSEAD, Suiza lidera el mundo en materia de competitividad de talento, seguido por Estados Unidos y Singapur.
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De 132 países, México ocupa el lugar 69, y el número ocho de las 20 naciones que conforman América Latina y el Caribe. Alberto del Castillo, director de Servicios de Adecco México, explica que el talento en inteligencia artificial es especialmente escaso y está distribuido de forma desigual en las industrias.
“El futuro es hoy. La inteligencia artificial está modificando las prácticas laborales, a tal velocidad que las organizaciones no deben dudar en impulsar a su talento y prepararlo para enfrentar estos cambios. Para que haya mayor competitividad tienen que permitir a los trabajadores interactuar con las máquinas en actividades híbridas”, dice.
De acuerdo con datos de la compañía de recursos humanos, a nivel mundial habrá más de 130 millones de nuevos roles en 2022, Asimismo, el 14% de la fuerza global estará cambiando de rol para el 2030.
Cambiar el chip
Aurora Tapia, psicóloga certificada por el Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales, menciona que, ideológicamente, el mexicano se asume como obrero. Por eso México se caracteriza por su mano de obra barata. “Hay mucho talento, sí, pero también mucho conformismo que nos frena para ser competitivos. Por otro lado, somos ingeniosos y de los que más trabajamos. Si usamos esa resistencia en positivo alcanzaríamos más metas y objetivos de negocio”, expresa. Los líderes jugarán un papel muy importante para impulsar este cambio de mindset organizacional, agrega.
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Invertir en capacitación
Las empresas ya no esperan hasta encontrar el talento que requieren. Este año, el 82% de las organizaciones pretende mejorar las habilidades de su propia plantilla laboral, según el estudio ‘Se buscan personas, los robots las necesitan’, de la firma de capital humano Manpower.
“Vemos que el desarrollo del mercado laboral está determinado por la unión entre robots, talento humano y algoritmos, pues estamos viviendo una revolución, donde los roles se están modificando a causa de la automatización”, señala Alberto del Castillo.
Ir un paso adelante
Los robots están ayudando a impulsar la productividad y a demostrar que son fundamentales para el crecimiento económico. En el estudio antes mencionado se advierte que, si no se invierte en automatización, se corre el riesgo de no generar riqueza ni nuevos puestos de trabajo.
