La Alianza del Pacífico culminó este sábado su XIV cumbre presidencial dispuesta a afrontar los "nuevos tiempos" económicos, políticos y globales, en medio del orgullo por los éxitos alcanzados pero también consciente de que "lo peor que puede hacer es dormirse en los laureles".
El mecanismo de integración comercial, creado en 2011 y conformado por Chile, Colombia, México y Perú, llegó a esta reunión en Lima en medio de un contexto de conflicto y desaceleración global, que particularmente afecta al sistema internacional de comercio.
Pese a ello, los países de la Alianza del Pacífico reafirmaron su apuesta y su deseo de profundizar el libre comercio, por el papel preponderante de la empresa privada como motor de las economías y la necesidad de afrontar como oportunidad y exigencia social la protección medioambiental, la lucha contra el cambio climático y la digitalización, dijo la agencia EFE.