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El príncipe Carlos busca un nuevo modelo económico mundial

El Príncipe de Gales acude al Foro de Davos en busca de soluciones y cambios de paradigmas que eviten más catástrofes climáticas.
jue 23 enero 2020 05:33 AM
Príncipe Carlos
El príncipe Carlos quiere debatir con industriales y expertos para cambiar el rumbo de la economía mundial.

Solo una revolución en la manera en que funcionan la economía global y los mercados financieros puede salvar al planeta de la crisis climática y asegurar la prosperidad futura, advirtió el miércoles el príncipe Carlos.

“No podemos seguir así, cada mes se rompe otro récord de temperaturas”, dijo a CNN en una entrevista exclusiva en el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) en Davos, Suiza. "Si lo dejamos pasar demasiado tiempo, como lo hemos hecho, el simple hecho de cultivar se volverá difícil”.

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El heredero del trono británico y ecologista de toda la vida habló con CNN después de lanzar un desafío a las élites empresariales y financieras globales en Davos para liderar un “cambio de paradigma, uno que inspire la acción a niveles y ritmo revolucionarios” para evitar la catástrofe que se aproxima.

“¿Queremos pasar a la historia como las personas que no hicieron nada por devolver el mundo desde el borde del abismo a tiempo para restablecer el equilibrio cuando podríamos haberlo hecho? No quiero eso”, dijo a la audiencia en la quincuagésima reunión anual del WEF.

“Y solo piensa por un momento: ¿de qué sirve toda la riqueza extra del mundo, obtenida de hacer 'negocios como de costumbre', si no se puede hacer nada con ella excepto verla arder en condiciones catastróficas?”.

Solo este año, los grandes incendios forestales exacerbados por el cambio climático han devastado vastas áreas de terreno en Australia y han matado a millones de animales. Investigaciones recientes muestran que los océanos del mundo están absorbiendo tanto calor como el generado por cinco bombas atómicas por segundo. El smog tóxico continúa asfixiando las ciudades de India a pesar de las reiteradas promesas de aire más limpio del gobierno, y la última década fue la más cálida de la historia en los registros.

La crisis climática ocupó los titulares en el primer día completo de la reunión de esta semana en Davos. La activista adolescente Greta Thunberg reprendió el martes a la élite empresarial y política por no hacer “básicamente nada” para reducir las emisiones de carbono que están impulsando el calentamiento global.

Al hablar más tarde, el presidente estadounidense, Donald Trump, que retiró a Estados Unidos del acuerdo climático de París 2015, se inscribió en una iniciativa global para plantar 1 billón de árboles, pero desdeñó a los activistas climáticos como “profetas perennes de la fatalidad” y los "herederos de los adivinos tontos de ayer”. Dijo que los avances resultantes del dinamismo de las economías de mercado eran capaces de resolver cualquier problema.

El príncipe Carlos, quien discutió el cambio climático con Trump el verano pasado, se reunió con Thunberg por primera vez después de su discurso.

“Ella es extraordinaria, representa una de las principales razones por las que he estado tratando de hacer todo este esfuerzo todos estos años”, dijo a CNN. “Siempre me ha preocupado el hecho de que, con mucha frecuencia, en términos de humanidad, dejamos las cosas demasiado tarde para tener que golpearnos contra un muro y experimentar una catástrofe antes de que algo suceda”.

El Príncipe de Gales utilizó el discurso del miércoles para lanzar su “Iniciativa de Mercados Sustentables”. Dijo que se necesitaban acciones urgentes para reconfigurar los mercados para poner a las personas y al planeta “en el centro de la creación de valor global”.

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El próximo jefe de Estado de Gran Bretaña, que pronunció su primer discurso sobre el medio ambiente en 1968, dijo que se necesitaban acciones audaces e imaginativas para enfrentar la mayor amenaza que la humanidad haya encarado. Esbozó un plan de diez puntos para colocar al mundo natural en el centro del mundo de los negocios.

“Se estima que la contribución de la naturaleza a la economía global tiene un valor de 125 billones de dólares anuales”, dijo. “La naturaleza es, de hecho, el alma de nuestros mercados financieros y, como tal, debemos —rápidamente— realinear nuestra propia economía para imitar la economía de la naturaleza y trabajar en armonía con ella”.

Los pasos propuestos por el príncipe incluyen revertir subsidios perjudiciales, invertir en innovación tecnológica, crear nuevos productos y servicios sustentables y brindar a los consumidores mucha más transparencia sobre las cadenas de suministro.

La cumbre mundial sobre el clima del año pasado en Madrid registró algunos avances en la lucha contra la crisis, pero estuvo muy por debajo de lo que muchos activistas climáticos y científicos habían esperado y no logró concretar las reglas de un nuevo mercado global de carbono, un elemento clave del acuerdo de París.

Ha habido promesas llamativas de algunas de las principales empresas del mundo en las últimas semanas. Microsoft dijo que planeaba volverse “negativo” en emisiones para 2030 como un paso hacia la erradicación de su histórica huella de carbono. Y BlackRock, que gestiona 7 billones de dólares en activos, prometió deshacerse de las inversiones que considera un riesgo para la sustentabilidad.

El príncipe Carlos dijo que convocaría una serie de discusiones en una variedad de industrias con innovadores, inversores y personas con capacidad de decisión para ayudar a diseñar un nuevo curso de acción y formar una alianza global para movilizar los billones de dólares necesarios para poner a la economía “en la vía correcta”.

“Tengo la intención de hacer todo lo posible para garantizar que se escuche el mensaje de urgencia, cambio sistémico, colaboración e integración”, dijo. “Simplemente no podemos perder más tiempo: el único límite es nuestra voluntad de actuar, y el momento de actuar es ahora”.

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