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Sin crecimiento del PIB en México, no habrá bienestar

AMLO pide usar "nuevos conceptos" que sustituyan al PIB como medición de una economía, y habla de "bienestar". Pero los economistas dicen que sin crecimiento es difícil mejorar la vida de la gente.
mar 12 mayo 2020 05:39 AM
Bienestar y PIB
Un bajo crecimiento o descenso en el PIB tendría efectos en la llegada de ingresos públicos para que el gobierno pueda echar andar acciones para la economía, bienestar y desarrollo. FOTO: NOTIMEX/ISAÍAS HERNÁNDEZ.

La realidad ha superado al discurso político. Atrás quedaron las promesas de que el Producto Interno Bruto (PIB) iba a crecer 4% al término del actual sexenio o las apuestas que el jefe del Ejecutivo lanzaba a los analistas y banqueros de que la economía iba a crecer mucho más que sus pronósticos.

Ahora, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha mutado su discurso y minimiza el desempeño del PIB como resultado de su administración en materia económica: es preferible el bienestar y desarrollo, antes que el crecimiento económico, aseguró este lunes.

Sin embargo, economistas consultados por Expansión aseguran que sin el crecimiento del PIB es muy difícil que la población mexicana goce de bienestar.

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“Hay que buscar nuevos conceptos. En vez de crecimiento hablar de bienestar; en vez de lo material, pensar en lo espiritual. Hay que cambiar ya con todo eso y no creer tanto en esas cosas”, dijo el presidente en su habitual conferencia matutina del pasado 11 de mayo.

No obstante, el crecimiento económico, medido a través del PIB, puede considerarse la base para que una familia cuente con bienestar, es decir que cuente con alimentación, vestido y calzado, además de acceso a servicios como educación, salud, agua, electricidad, , considera el Consejo Nacional de Evaluacion de la Politica de Desarrollo Social (Coneval) cuando define la línea de bienestar.

“Decir que no sirve medir el PIB o el crecimiento, sería tan absurdo como decir que no sirve medir en pesos y centavos cuánto está ingresando a tu casa o a tu familia”, consideró Luis Mauricio Torres, economista y coordinador del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).

Al no tener empleo o ingresos por renta o venta de algún bien, las familias no cuentan con ingresos suficientes para satisfacer sus necesidades, partiendo de este supuesto es difícil que pueda medirse o reflejarse algún tipo de bienestar, detalló.

El PIB mide el crecimiento económico de un país, podemos definirlo como el total de bienes y servicios finales que se producen en un país o comunidad determinada, en un determinado tiempo. El concepto se relaciona más con la producción, explicó Marcelo Delajara, economista y director del Programa de Crecimiento Económico y Mercado Laboral en el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY).

“Si hay crecimiento económico y bienestar podemos decir que hay desarrollo”, asegura el especialista.

De acuerdo al Banco de México (Banxico) el crecimiento del PIB también refleja la inversión que hay en el país para casas, carreteras, puentes, oficinas o aeropuertos, por ende, nos ayuda a tener una perspectiva para la generación de empleos.

Si la tasa del PIB es negativa durante un periodo determinado, la producción y actividad económica del país no aumentará y estará en recesión. En estas condiciones, es probable que haya más desempleo y que esto afecte seriamente a muchas familias, detalla el banco central en su página online.

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“Ambos conceptos: economía y bienestar van de la mano, tienen sus características de manera individual. El PIB es una medición de lo tangible, el bienestar es una percepción más subjetiva; considera elementos como la calidad de vivienda, calidad de empleo, seguridad pública, seguridad económica, educación y su acceso, medio ambiente y satisfacción con la vida”, comentó Francisco J. Orozco, director del Departamento de Contabilidad y Finanzas de la Escuela de Negocios del Tec de Monterrey.

No obstante, concebir un país con bienestar, no es producto inmediato del crecimiento económico, se da en el mediano plazo. “Si este trimestre el PIB cae eso no te va a cambiar mucho la trayectoria del bienestar en México, excepto si esa caída viene para quedarse, si esa caída en el PIB no la recuperamos después, solo si recuperamos el ritmo de crecimiento del PIB per cápita de 2% o más, porque cuando éste crece a 2%, tú estás duplicando el ingreso por persona cada 35 años”, comentó Marcelo Delajara, especialista del CEEY.

Círculo vicioso

Adicionalmente, un bajo crecimiento o descenso en el PIB tendría efectos en la llegada de ingresos públicos para que el gobierno pueda echar andar acciones para la economía, bienestar y desarrollo.

“Si no hay crecimiento económico, disminuye la recaudación de ingresos por impuestos; si hay menor producción, hay menos recaudación de ISR, y si hay menos consumo, hay menos recaudación de IVA”, esto representa menores recursos públicos disponibles para echar andar acciones, a través de políticas públicas, que ayuden a recuperar la economía, y por ende elevar el bienestar, explicó Mauricio Torres, del Imco.

En la actualidad, el sector público está recibiendo menos dinero por la exportación de petróleo, debido a la baja en sus precios a nivel mundial, lo que limita cada vez más el espacio de la administración pública para atender las necesidades de la población.

“Si tú no estás como gobierno estimulando crecimiento con políticas enfocadas al crecimiento económico, la economía va a crecer cada vez menos, tus ingresos van a caer, y cuando la economía se estanca la gente paga menos impuestos, evade más”, refirió Delajara.

El representante del CEEY recordó que mucha de la historia del fracaso económico y el mismo nivel de vida de hace décadas en Argentina tiene que ver con el problema de tratar de forzar una situación de bienestar en la población, a través del gasto público cuando no se tienen los ingresos para hacerlo.

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