"Por eso la decisión de hacer esta pausa y mantener la tasa en su nivel actual", dijo a Reuters el gobernador del banco central, Alejandro Díaz de León, en una entrevista.
"Sentimos que le da opciones al banco central para que conforme se vayan dando los datos tanto de inflación como de los factores que inciden sobre la inflación, podamos identificar de mejor manera qué es lo que conviene hacer", añadió.
Antes de la decisión, la mayoría de los analistas proyectaron un recorte de 25 puntos base, según una encuesta de Reuters.
Díaz de León dijo que datos contradictorios y la volatilidad en la inflación y los mercados complicaron las decisiones de política monetaria. "Claramente hemos visto de septiembre a acá muchas variables que se han movido en sentidos opuestos y de difícil identificación".
La recuperación económica de México está más en línea con los dos escenarios más optimistas establecidos por el banco central en su último informe trimestral y menos con el más pesimista de sus pronósticos, afirmó.
Banco de México ha establecido varios escenarios con pronósticos sobre la economía. En el más catastrófico, de "afectación tipo U profunda", el banco revisó en agosto su estimación de contracción para este año a un 12.8%, mientras que en el más optimista, o "tipo V", calcula un descenso de un 8.8%.
Mientras tanto, en el intermedio, de "afectación tipo V profunda", anticipó un declive del 11.3% en 2020.
"El tipo de recuperación que hemos visto y los datos más recientes se acercan más a las trayectorias de 'V' y 'V profunda' que teníamos en el informe (trimestral) anterior", dijo Díaz de León.
La economía de México creció un 12% durante el tercer trimestre, compensando gran parte de la contracción récord de los tres meses anteriores en el punto álgido del confinamiento por la pandemia del coronavirus.