La petición de Hacienda obedece a que “el nivel de reservas internacionales es alto, y que agregar recursos a estas reservas implica un costo”.
En un comunicado, la secretaría detalló que “el objetivo de este intercambio es abonar a la disciplina fiscal. Al cancelar esta deuda, se logra un ahorro en el costo de la misma, así como un beneficio en el nivel de la deuda y, como consecuencia, un impacto positivo en el presupuesto”.
El FMI creó los DEGs en 1969 para ayudar a complementar las reservas internacionales de los países miembros. En agosto, el organismo aprobó la asignación de 650,000 millones de dólares ante la falta de liquidez global. Se trata del monto más alto en la historia del FMI y su objetivo es ayudar a la recuperación económica tras el golpe sufrido por el coronavirus.
En su comunicado, Hacienda señaló que estos recursos no se van a incluir en el presupuesto 2022, “no se considerarán como ingreso del gobierno y tampoco como egreso”.
Especialistas han señalado que el uso de estos recursos no servirían para bajar la deuda pública de México, tal y como lo ha pregonado el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues solo representan un traspaso de dinero.