Rocío Hernández, directora de consultoría en Compensación de AON, explicó que generalmente las empresas preparan sus presupuestos entre septiembre y octubre para aplicar al siguiente año. Pero en diciembre hubo dos factores que generaron traslapes en los presupuestos de las empresas: una inflación de 7.36% y un incremento al salario mínimo de 22%, cuando se preveía de 15%.
“Sabemos que muchas empresas, áreas de RH están en aprietos, porque pagan por arriba del salario mínimo y esto trajo consecuencias económicas complicadas, comenzamos a tener traslapes, temas de más trabajadores sindicalizados, negociaciones con el personal a través de los sindicatos, y la reconfiguración de tabuladores, cuestiones en las que aún se trabajan”, comentó la especialista.
De acuerdo con una encuesta realizada por AON a 300 empresas, con la inflación y el incremento al salario mínimo, el 60% mantuvo el presupuesto que ya tenía aprobado, el 40% hizo ajustes importantes en algunos rubros. El 37% aumentó el porcentaje que tenía pronosticado para el pago de personal, por arriba de 1% y 2% de lo que tenían contemplado.
2.- Pago de utilidades o PTU. La reforma que regula el outsourcing, trajo un mayor número de empleados directos para las empresas, lo que genera modificaciones en el monto y reparto de utilidades, las cuales deben pagarse a más tardar el 30 de junio de este año.
“Derivado de la eliminación del outsourcing, las empresas tuvieron que hacer cambios en sus estructuras, tenemos casos de empresas que eran 10 empresas, y ahora 4, o viceversa, como este año se empieza a pagar el reparto de utilidades con estos efectos de reestructuras y hay muchas implicaciones. Las empresas tendrán que hacer un pago importante de PTU, más bonos, pero no hay manera de pagarlos todos”, explicó Hernández.
Entre las implicaciones de estos cambios están hacer anticipos de PTU bajo el diseño de justificaciones, reclamos de trabajadores, pues por ejemplo, en empresas hermanas les tocará más o menor reparto de utilidades.
Además esta disposición debe contemplarse con un nuevo tope que se determinó para este año: tres meses del sueldo del trabajador o el promedio PTU de los últimos tres años.
3.- La reforma a pensiones está reconfigurando la forma de hacer cálculos y pagos del patrón.
“El crecimiento en cuotas se verá a partir de 2023, hay una modificación importante de las cuotas de la empresa; estamos incrementando del 6.5% del salario base de cotización, que era la aportación total antes de la reforma, del salario base de cotización, vamos a pasar a una aportación de 8.7%, y esto va totalmente, o la mayoría con cargo a la empresa”, detalló Rosalba del Castillo, directora adjunta Wealth en AON.
Esto implica un replanteamiento de los presupuestos en el corto y largo plazos, los cambios que hagan dependerán de su estructura demográfica y la salarial.