Por su parte, a través de COMCE Noreste y COMCE Chihuahua, el Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior ha solicitado que se tome en cuenta a las empresas certificadas en C-TPAT y en OEA (operador económico autorizado) para que no se revisen porque ya son empresas certificadas como empresas seguras, destacó Fernando Ruiz.
“Ahí le bajamos el tiempo porque es un porcentaje alto de empresas que ya están certificadas”, aseguró.
Sin embargo, la solución al tema migratorio, asunto complejo, no se puede abordar desde un solo frente.
“La Cancillería ha hecho su trabajo, la red de consulados, pero el tema migratorio no es un área que le corresponda. Es un área de la Secretaría de Gobernación, concretamente al INAMI (Instituto Nacional de Migración). Recientemente se han desplegado elementos de la Guardia Nacional para darle monitoreo y seguimiento a las cuestiones migratorias”, explicó Baker Pineda.
“Lo primero que tenemos que hacer es, tener una muy buena coordinación al interior del gabinete para darle medidas adecuadas. ¿Cuáles son esas? Puede ser acompañamiento, pueden ser registro; una serie de retenes a lo largo de carreteras y vías de transporte”, para que disminuya la presión migratoria de parte de Estados Unidos, detalló.
México también puede reclamar a Estados Unidos por la falta de coordinación entre el gobierno federal y los estatales, pues “hay cosas que el estado o el gobernador en cuestión puede tomar aunque la perspectiva del gobierno federal sea diferente. No importa lo que hagamos de este lado (en México), si allá (en EU) no existe esa coordinación entre la autoridad federal y estatal estas cosas van a seguir pasando”, anticipó el académico de la UP.
Las pérdidas
Aunque no se ha puesto una cifra del impactó económico que provocaron estas revisiones, el Consejo Coordinador empresarial (CCE) calculó el 13 de abril pérdidas por 8 millones de dólares diarios.
“No sabemos realmente cuánto. En la manufactura hubo retrasos, hubo aumento de costos por estos retrasos, pero no afectó tanto como a los productos perecederos, que algunos pudieron haber perdido su calidad y la posibilidad de comerciarse”, explicó Ruiz Huarte, del COMCE.
Además, agregó Baker Pineda, las afectaciones económicas también se sintieron en Estados Unidos, pues “en Estados Unidos hay una buena parte de empleos que están relacionados con México”, apuntó.
Entonces, si esto tiene que ver con un tema político, con miras a la reelección de Abbott, “te ganará unos cuentos votos de los sectores más duros de la derecha estadounidense, pero la afectación económica, que te eches encima a un electorado como el hispano, y no se diga la afectación económica, a largo plazo no es sustentable. Quien tome esas decisiones tendrá que cargar con las consecuencias”, añadió.