Pandemia trae 30 nuevos súper ricos a Latinoamérica y más pobreza extrema: Oxfam

La riqueza conjunta de los 91 más ricos supera el PIB (Producto Interno Bruto) de países como Colombia, un país con más de 50 millones de habitantes. Y los 30 nuevos milmillonarios que surgieron con la pandemia acumulan una riqueza de 66,100 mdd, más que todo el PIB de Uruguay.

Este informe se inserta en el contexto de la pandemia y sus consecuencias. Pero también propone una solución: impuestos a la riqueza a la región para abatir la desigualdad y apoyar programas que reviertan los efectos negativos que ocasionó el covid-19 entre los más pobres, señala Carlos Brown, gerente de justicia fiscal de Oxfam Latinoamérica.

¿Por qué gravar la riqueza? El informe plantea que actualmente hay un aparato de leyes, en la mayoría de países latinoamericanos, que beneficia a los más ricos y, al mismo tiempo, castiga a los más pobres, haciendo cada vez más grande.
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Dos barcos distintos bajo una misma tormenta

“Esta es la primera vez en 25 años que crecen tanto la riqueza como la pobreza extrema. Para el caso latinoamericano el dato es demoledor: por cada súper rico nuevo en América Latina hay 400,000 personas más en pobreza extrema en la región”, señala el especialista.

Esto, en parte es posible gracias a la caída de la contribución de las grandes riquezas en los últimos 40 años al dinero público con el que los países de América Latina buscan universalizar la educación, el acceso a la alimentación, la salud y una transición a una economía limpia justa.

México, fuera de la ruta hacia los impuestos a la riqueza

Todos estos retos serán casi imposibles de cumplir sin un cambio de rumbo. Sobre todo, sin voluntad política. Pues hacen falta reformas fiscales que no permitan, por ejemplo, el hecho de que 17 de los 91 mil millonarios de la región viven en países en los que no se aplica ningún tipo de impuesto a la herencia, donaciones o sucesiones.

En México, 55.7 millones de personas (43.9% de la población) se encuentran en pobreza multidimensional y 10.9 millones están en pobreza extrema (8.5% de la población), según Coneval . Del país emergen algunos de los hombres más ricos del mundo y, sin embargo, está fuera de la discusión y la ruta hacia la solución: gravar más la riqueza de los multimillonarios.

En el informe global, por ejemplo, se indica que las poco más de 2 mil personas más ricas del mundo vieron crecer su pobreza en 2,700 millones de dólares por día durante la pandemia. Eso quiere decir que con 4 días de esas ganancias extraordinarias alcanzaría para erradicar la pobreza extrema en México durante un año.

Y mientras en países como Colombia, con el nuevo gobierno de Gustavo Petro, Chile o Brasil están caminando hacia un nuevo paradigma de justicia fiscal, México rehúye a discutir siquiera un camino en esa dirección, afirma Carlos Brown, quien plantea que el siguiente gobierno federal deberá subirse a esta nueva ola.

El efecto Slim

"Desde el principio de la pandemia, su riqueza ha crecido un 42% (25,500 millones de dólares), a un ritmo desenfrenado de 787 mdd al mes, o 26.23 millones por día en un país con 8.5% de personas en pobreza extrema, viviendo con menos de 3 USD al día con distintas carencias económicas y sociales. ¡Aún más vertiginoso es que su fortuna se ha multiplicado por 5 en los últimos 22 años!", ejemplificó el informe de Oxfam.

Cinco recomendaciones

Finalmente, el informe de La ley del más rico hace cinco recomendaciones puntuales para abatir esta desigualdad:

Crisis extraordinarias, medidas extraordinarias

Es urgente aplicar medidas tributarias temporales y excepcionales para generar recursos adicionales que sean reinvertidos en planes de contención y mitigación para quienes viven en situación de mayor vulnerabilidad:

a) Contribuciones de solidaridad sobre la riqueza. Como hizo Argentina en respuesta a la pandemia.
b) Gravar las ganancias extraordinarias de grandes corporaciones.

Impuestos recurrentes a súper ricos

Tasas impositivas suficientemente elevadas como para reducir sistemáticamente la riqueza extrema, la concentración del poder y las desigualdades.

Elevar la tributación sobre las rentas del capital y ganancias financieras

Para equipararlas, al menos, a las rentas del trabajo en su nivel de tratamiento fiscal.

Aumento al impuesto sobre la renta del 1% más rico

Elevar sistemáticamente esta tributación, hacia un objetivo en torno al 60% e impulsar los impuestos a herencias, donaciones y sucesiones.

Acuerdo fiscal latinoamericano

Con el objetivo de ampliar la cooperación y la coordinación de políticas tributarias entre los países de la región, con medidas para afrontar la elusión y los paraísos fiscales.