Una transformación para cambiar la economía
El mundo árabe siempre está asociado al petróleo, los jeques y las altas temperaturas. Pero desde hace algunos años han buscado cambiar esa visión que se tiene de ellos. El último hit del país fue la contratación de uno de los mejores futbolistas del planeta: Cristiano Ronaldo, quien desde este año viste la camiseta del Al Nassr.
A eso se suma la organización de varios eventos, como la final de la SuperCopa Española, la final de la SuperCoppa Italiana o el juego entre el París Saint-Germain y el combinado de los dos mejores equipos de la capital, Riad.
Parece que los árabes quieren llamar la atención del mundo por su músculo financiero, pero no, detrás de todo esto hay una visión más profunda, de acuerdo con la filosofía de Al-Ibrahim.
“El deporte es grande, pero esto no lo hacemos para llamar la atención, lo hacemos para transformar la economía”.
Y es así como Arabia Saudita levanta la mano para acoger la Expo 2030 , evento global que tiene como objetivo promover el progreso y fomentar la cooperación, con la participación del sector privado, la sociedad civil y el público en general en exhibiciones interactivas, espectáculos en vivo, talleres y conferencias.
En el aspecto deportivo realizarán los Juegos Asiáticos de Invierno 2029 y la Copa de Asia Femenina, además de que presentarán una candidatura para la Copa de Asia masculina en 2027.
“El deporte está creciendo muy rápido en Arabia Saudita. Tenemos 35 millones de habitantes. Muchos de ellos tienen menos de 30 años, y a 60% le gusta mucho el deporte, todo tipo de deportes.
“Así que tengan en cuenta que la generación joven, ese equipo saudí que le ganó al campeón del mundo, a Argentina, ama el fútbol, ama el deporte. Nosotros hacemos esto por la gente. No lo hacemos por imagen”.
Y así, con esa filosofía, continúa y avanza la transformación de Arabia Saudita.