Cuando se vendió Banamex en 2001 a Citi “la ley decía que las operaciones cruzadas en Bolsa, no generaban el pago de impuestos, el acto no estaba gravado, entonces los vendedores Roberto Hernández y compañía lo que hicieron fue pasar la venta por Bolsa, y no se pagaron impuestos, lo decía la Ley”, contó a Expansión, Gabriel Reyes, procurador fiscal de la Federación en ese entonces.
Hoy la ley te dice que debes pagar impuestos por operaciones en Bolsa, “pero el valor actualizado de las acciones da pérdida, se debe pagar el ISR cuando el valor actualizado genera una utilidad, pero en este caso no la genera”, explicó Reyes.
"(La operación) no tenía lógica desde el punto de vista de que estaban propalando una venta en la cual el precio a recibir es infinitamente menor, o al menos es menos del 60% del que recibieron cuando Citi compró. Pero si a eso le sumas que el valor del activo -bien sea en créditos, bien sea en acciones- tiene que actualizarse, el valor fiscal de lo que está vendiéndose, supera por mucho el precio de venta, por lo tanto hay una pérdida. Al haber pérdida, sale a pagar absolutamente nada”, agregó.
Toda operación mercantil genera impuestos si lleva consigo el tema de una utilidad, explicó por su parte Ramón Martínez, experto en finanzas corporativas y académico de la Escuela Bancaria Comercial (EBC).
Para su oferta en Bolsa, Citi tendrá que dar a conocer su precio en acciones, el cual es valuado por firmas de auditoría (como Deloitte, KPMG, EY, PWC) y debe ser aprobado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
Si se compran las acciones a un valor mayor del valuado por las auditorias, el vendedor, que en este caso es Citi, estaría recibiendo un valor superior al valor contable, por lo cual tendría que pagar impuestos, lo cual no aplica, si se paga una cifra menor al valor de mercado, agregó el especialista.
Comentó que el valor de una empresa financiera se da en función de los activos tangibles y en carteras de créditos que van a generar utilidades.
“Me refiero a lo que tienen en carteras de ahorro y de crédito, son recursos que tiene la empresa, recordemos que el negocio de un banco es la intermediación; el precio al cual compro el dinero, y al precio al cual lo vendo, el diferencial se llama margen financiero que se da por las tasas; compro dinero a un precio bajo, y vendo dinero a través del crédito a un precio alto”, detalló Martínez Juárez.
Cabe destacar que el año pasado, cuando Citigroup anunció la venta de Banamex, Bank of America (BofA), Securities estimó en 15,500 millones de dóares (mdd) todos los activos de esos negocios (sucursales, cuentas de los clientes, acervo cultural, créditos de nómina, de tajetas, hipotecas de auto y pymes, además de afores y seguros). En 2001, Citigroup compró Banamex por 12,500 mdd a precios de ese año.
En el transcurso de la oferta para la venta directa en 2023, fuentes cercanas al proceso informaron que Germán Larrea, dueño de Grupo México, y último contendiente para comprar el banco, había llegado a un acuerdo con Citi para comprar el 80% de Banamex por 7,100 mdd.
Apenas el martes 23 de mayo pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que bajo el supuesto de que Banamex valiera 7,000 mdd, el gobierno esperaba recaudar 2,000 mdd por impuestos.
Entre los factores y supuestos que influyen cuando se hace la valuación de una empresa destacan: su infraestructura, los flujos que se puedan generar en el futuro. En el caso de un banco se analizan factores como las nuevas condiciones del mercado, como la presencia y operación de las fintechs, los activos que ya no usa la empresa, la competencia, o qué tanto se utilizarán las tarjetas en un futuro, “contemplas una proyección de 10, 20 años, todo influye”, explicó Sergio García Quintana, integrante de la Comisión Técnica de Finanzas y Sistema Financiero del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM).
“Todos estos factores pueden aumentar o disminuir los ingresos, esos ingresos se traen a valor presente y ahí obtienes una tasa de rendimiento, entonces ahí dices, ok, en esta compra voy a meter menos de todo el valor presente, cuando el valor presente es positivo con la tasa de rendimiento que estás pidiendo, entonces es una inversión aceptable”, agregó García Quintana.