El martes, en la Cámara de Diputados los coordinadores parlamentarios decidieron dejar la discusión y posible aprobación de la reforma constitucional para el próximo periodo ordinario de sesiones, que tendrá lugar entre febrero y abril de 2024.
México es el país de América Latina en el que se trabajan más horas al año, con 2,127.8, muy lejos de las 1,715.8 horas promedio de los países miembros de la Organización para Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
Costo para las empresas
Reducir ocho horas de trabajo a la semana tendrá un impacto económico inicial de 20% para los empleadores, comentaron Antonio Fajer, CEO de Pentafon; y Rolando Silva, integrante de la comisión técnica de seguridad social del Colegio de Contadores Públicos de México (CCPM).
“Un 20% en el costo de la nómina no siempre será mayor que el margen de utilidad que tenga una pequeña empresa”, advirtió Silva Briceño.
“Y no estoy considerando si lo vas a tener que cubrir con horas extra dobles, pagos triples, más infraestructura, que probablemente (el costo) llegue hasta 40%”, estimó Fajer de Pentafon, empresa que ofrece servicios de atención, cobranza y ventas.
Una medida de este tipo, si no se implementa de la manera adecuada, puede provocar que no se generen empleos, el cierre de empresas o un aumento de la informalidad, que en el país es de 55.4% de la población económicamente activa (32.9 millones de personas).
En México hay un millón de patrones en la formalidad -que inscriben a sus trabajadores en el Seguro Social-. De ese millón, 30% tiene un empleado y 70% tiene cinco, o menos, detalló rolando Silva.
Además, hay que tener presente que cualquier incremento en los costos de producción se trasladará al consumidor final, es decir, se traducirá en el encarecimiento de productos y servicios. Dicho de otro modo, inflación.