Las elecciones presidenciales de Estados Unidos del 5 de noviembre de 2024 no solo definirán el futuro de la nación más poderosa del mundo, sino que también tendrán un impacto significativo en la economía global, particularmente en México y su moneda.
Según un análisis de Grupo Financiero Monex, las propuestas de los candidatos Kamala Harris y Donald Trump podrían provocar oscilaciones importantes en el tipo de cambio, afectando la economía, para bien o para mal, en el corto y mediano plazo.
Kamala Harris, la candidata demócrata, presentó un plan económico que sigue la línea de su predecesor, Joe Biden, con un enfoque en el gasto público masivo. Esta estrategia podría consolidar el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos y mantener la tendencia de nearshoring, donde empresas trasladan sus operaciones a países cercanos como México.
A pesar de que, en el pasado Harris no mostró simpatía por el TLCAN, no anticiparíamos cambios de gran envergadura en el T-MEC durante la revisión de 2026. Esto permitiría que la tendencia actual del nearshoring se mantenga, continuando así con el impulso a las exportaciones mexicanas y la Inversión Extranjera Directa
Monex estima que, si Harris gana la presidencia, el peso mexicano podría beneficiarse, cotizando en un rango de $18.50 a $20.00 en el próximo año.
Esto se debe a que la estabilidad económica y el crecimiento en Estados Unidos bajo su administración podrían mejorar las relaciones comerciales bilaterales y fomentar la inversión extranjera directa (IED) en México. Además, la continuidad en la política migratoria actual garantizaría un flujo constante de remesas, otro factor positivo para el peso.
Sin embargo, este escenario positivo no está exento de riesgos. El incremento en el gasto público podría generar presiones inflacionarias, tanto en Estados Unidos como en México, afectando la paridad cambiaria.
Por otro lado, una victoria de Donald Trump podría generar mayor incertidumbre y volatilidad en el peso mexicano. Trump ha propuesto un enfoque económico nacionalista, centrado en fortalecer la manufactura estadounidense y reducir la dependencia de las importaciones, incluyendo aquellas provenientes de México.
habría que considerar la posibilidad de una renegociación de tratados comerciales en términos menos favorables para México, centrados en la primera revisión del T-MEC en 2026
Monex advierte que, bajo una administración de Trump, el peso mexicano podría enfrentar presiones significativas, depreciándose hasta un rango de $19.00 a $20.80 en el 2025. Esto se debe a varias razones:
Aunque Trump podría asegurar la permanencia del T-MEC, la relación bilateral podría tensarse, afectando negativamente la economía mexicana, que ya enfrenta problemas internos como la desaceleración económica y la inseguridad, señala Monex.
