El banco central de China anunció el miércoles un nuevo recorte en una tasa de interés de referencia, apenas un día después de presentar una amplia serie de medidas para relanzar la economía.
El interés de los préstamos a un año concedidos a las instituciones financieras se redujo del 2.3 al 2%, dijo el banco central en un comunicado en su sitio web.
En julio, la autoridad bancaria ya había reducido este tipo de interés y los economistas esperaban un nuevo recorte.
En la víspera, el gobernador del Banco Popular de China, Pan Gongsheng, anunció en una rueda de prensa en Beijing una serie de medidas de respaldo al consumo y al sector inmobiliario con tal de estimular la ralentizada segunda economía mundial.
Las bolsas de Hong Kong y Shanghái reaccionaron con fuertes subidas a estos anuncios, que incluyen un recorte de la ratio de reserva mínima obligatoria de los bancos y bajadas de los tipos de interés para los préstamos hipotecarios existentes.
Cerca de dos años después de levantar las restrictivas medidas anticovid, la economía china no acaba de despegar a pesar de los pasos dados por las autoridades para relanzar la actividad.
La recuperación pospandémica fue más breve y menos robusta de lo esperado, lastrada por una crisis inmobiliaria, el débil consumo y el alto desempleo, especialmente entre los jóvenes.
El Gabinete chino publicó el miércoles directrices para promover el empleo suficiente y de alta calidad, comprometiéndose a dar prioridad a la ocupación durante el desarrollo socioeconómico y a mejorar el crecimiento razonable de los salarios, informaron los medios estatales.
Las directrices llegan en un momento en el que algunos trabajadores sufren fuertes recortes salariales y la tasa de desempleo juvenil alcanza su nivel más alto desde que las autoridades revisaron la metodología estadística, lo que supone un quebradero de cabeza para las autoridades en su intento de estimular el crecimiento económico.
Las directrices, que siguen al agresivo paquete de estímulo del banco central presentado el martes, dicen que el país promoverá la coordinación de las políticas fiscal, monetaria e industrial para intensificar el empleo como motor del desarrollo.
China tratará de "prevenir el riesgo de desempleo a gran escala y tomarlo como línea de fondo" y "mejorar la estabilidad laboral de los trabajadores y unos ingresos razonables", dijo la agencia estatal de noticias Xinhua.
El país asignará de forma razonable los subsidios al empleo y hará un uso eficaz de los fondos del seguro de desempleo y de diversos fondos industriales para promover el trabajo, afirmó Xinhua.
China creó 8.26 millones de puestos de trabajo en los siete primeros meses, el 68.8% de su objetivo anual.
Las medidas del martes, más amplias de lo previsto, constituyen el último intento de las autoridades de restablecer la confianza en la segunda economía mundial, después de que una serie de datos decepcionantes suscitara la preocupación por una prolongada ralentización estructural.
Los inversores y los economistas esperan más apoyo político en el ámbito fiscal.
Con información de AFP y Reuters
