Elon Musk se queja de los aranceles chinos... y Trump lo escucha

Un intercambio entre Elon Musk y el presidente Donald Trump en Twitter el jueves destacó los desafíos que enfrentan los fabricantes de autos cuando hacen negocios en China.

Después de que Trump escribiera un tuit sobre el déficit comercial "masivo" de Estados Unidos con la nación asiática, Musk respondió con una pregunta: "¿Crees que EU y China deberían tener reglas iguales y justas para los automóviles?"

Los vehículos de Tesla enviados a China enfrentan un impuesto de importación del 25%, mientras que un automóvil importado de China a los Estados Unidos solo está gravado con un 2.5%, dijo Musk, "una diferencia de diez veces".

Trump leyó el tuit en voz alta durante un evento el jueves formalizando los planes de su administración para un arancel del 25% sobre el acero y un arancel del 10% sobre las importaciones de aluminio, respectivamente. Esos aranceles no están relacionados con los tuits de Musk, pero Trump insinuó durante su discurso que algún día podría aumentar los impuestos a los automóviles chinos importados.

"Solo queremos equidad", dijo Trump después de leer el tuit de Musk. "Vamos a hacer un programa de impuestos recíproco en algún momento, de modo que si China nos va a cobrar el 25% o si India nos va a cobrar el 75% ... Vamos a estar en esos mismos números".

Musk dijo en otro tuit anterior que está "en contra de los aranceles de importación en general, pero las reglas actuales dificultan las cosas". Es como competir en una carrera olímpica con zapatos de plomo".
"Lo planteamos con la administración anterior y no pasó nada. Solo quiero un resultado justo, idealmente donde los aranceles / reglas sean igualmente moderados. Nada más. Espero que esto no parezca irracional", dijo en otro tuit.

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China es el mercado automotriz más grande del mundo. Y la mayoría de los principales fabricantes de vehículos estadounidenses tienen plantas de propiedad conjunta en China, por lo que pueden evitar aranceles de importación elevados.

Pero Tesla no. La compañía quiere abrir una fábrica en Shanghai, pero Bloomberg informó el mes pasado que Tesla todavía no ha llegado a un acuerdo con las autoridades locales para hacerlo.

Musk dejó en claro en un tuit el jueves que discrepa de la regla del gobierno de China que prohíbe que los fabricantes de autos extranjeros que posean más de la mitad de cualquier planta de fabricación en el país.
Mary Lovely, experta en comercio y miembro senior del Instituto Peterson no partidista, dijo que Tesla probablemente no está de acuerdo con la titularidad conjunta porque "posee una valiosa propiedad intelectual" y China tiene un gran interés en sacar provecho de su conocimiento sobre vehículos eléctricos.

Hay varias startups de automóviles eléctricos originarias de China que esperan competir un día con Tesla.
Lovely dijo que hay una razón por la cual Estados Unidos y China tienen tarifas tan drásticamente diferentes para los automóviles importados. Se remonta a cuando China se unió por primera vez a la Organización Mundial del Comercio, y llegó a un acuerdo con los Estados Unidos para mantener altos los aranceles de los automóviles y recortar los impuestos a la importación de otros productos, como la soya.

"China siempre se ha visto a sí misma como un país que necesita una fuerte industria automotriz nacional", dijo Lovely.

Y en el pasado, la tasa arancelaria del 2.5% para los automóviles chinos importados a los EU no ha tenido demasiada importancia. La demanda de vehículos es tan alta en China que el país apenas envía ningún vehículo al extranjero.

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Eso, sin embargo, está cambiando.

Tanto Volvo como General Motors comenzaron a vender automóviles fabricados en China en los Estados Unidos en los últimos años. Y a medida que el mercado chino se sature, el país está listo para convertirse en un importante exportador de automóviles.

Eso podría significar que es hora de renegociar las tarifas de importación y exportación, dijo Lovely. Pero ella no cree que el plan de Trump para ahondar en las tarifas de represalia sea el enfoque correcto.

"El hecho de que Trump planteó esto muestra que él no sabe cómo suceden realmente las negociaciones comerciales", dijo. "Solo amenazar nunca ha funcionado con los chinos".

El intercambio de Twitter de Musk con Trump se produjo una semana después de que el presidente anunciara el plan tarifario, lo que desató temores de una guerra comercial.

Las nuevas tarifas excluirán inicialmente a Canadá y México, dijo Trump el jueves. Los aranceles entrarán en vigor en 15 días.

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El año pasado, parecía que se había perdido el amor entre Trump y Musk. El multimillonario CEO renunció a dos consejos asesores empresariales de la Casa Blanca en protesta después de que Trump decidiera sacar a Estados Unidos del acuerdo climático de París.

Pero Trump ha emitido brillantes comentarios públicos sobre Musk en los últimos días, específicamente sobre el lanzamiento histórico de un cohete realizado por SpaceX de Musk el mes pasado. El lanzamiento inaugural de Falcon Heavy, el cohete más potente en operación, capturó al público al aterrizar dos de los aceleradores laterales del cohete después del despegue. Los cohetes llevaron a cabo un aterrizaje sincronizado en pistas de tierra en Florida.

Trump habló sobre el espectáculo a los periodistas el jueves.

"Para mí, eso fue más sorprendente que ver el cohete subir porque nunca había visto eso antes. Nadie lo ha visto antes, donde guardan los aceleradores. Regresaron sin alas ni nada, aterrizaron tan bellamente ", dijo Trump.

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