El contrato para la nueva refinería se otorgará sin licitación abierta
El gobierno busca lanzar una licitación restringida para la construcción de la nueva refinería de Dos Bocas, en Tabasco, debido a que la nueva administración de Andrés Manuel López Obrador quiere evitar la participación de empresas internacionales involucradas en actos de corrupción, dijo la titular de la Secretaría de Energía, Rocío Nahle, este martes durante su discurso en la conferencia Energy Mexico 2019.
“Estamos evitando empresas internacionales que tengan algún antecedente de corrupción. Esa es una de las primicias que ha mandado el presidente, y por ello estamos entrevistando directo a grandes empresas que han construido infraestructura de este tamaño”, explicó. Por ello, la participación para el proyecto será restringida.
Lee: ¿Es viable el plan petrolero de AMLO?
Este mecanismo de otorgar los contratos por convocatoria restringida se une a otras decisiones recientes de Pemex en el mismo sentido, como la asignación de contratos para el desarrollo de campos petroleros en aguas someras y terrestres. Algunos expertos y asociaciones se han pronunciado en contra de que la petrolera asigne este tipo de contratos sin una licitación abierta.
El gobierno estima que la nueva refinería costará cerca de 8,000 millones de dólares, y quiere tenerla lista en los próximos tres años para elevar la capacidad de refinación de productos petrolíferos en el país.
La meta de la administración es alcanzar la autosuficiencia en producción de gasolinas en el país, que ahora depende en cerca del 80% de importaciones, la mayoría desde Estados Unidos. Con ello se pretende revertir la balanza petrolera, que hoy es negativa para México.
“En la Sener nos hemos dado a la tarea de establecer, de una forma responsable, una ruta de trabajo que nos permita a los mexicanos, en un corto a mediano plazo, revertir algunos índices productivos y comerciales que hoy no son favorables, para que al final del sexenio la balanza comercial petrolera deje de ser deficitaria, y tener un superávit para equilibrar la balanza de pagos en el país”, dijo la titular de Sener.
Recomendamos: Al plan energético de AMLO le puede faltar petróleo
La balanza comercial de Pemex cerró 2018 con un déficit de 3,383 millones de dólares, según cifras de la propia petrolera. Esta balanza registraba un superávit de 12,787 mdd en 2014.
¿Sí al fracking?
Nahle no descartó que en un futuro se encuentre una vía para que se haga fracking dentro de México para la extracción de gas natural proveniente de las rocas de lutitas, el llamado shale, un recurso muy abundante en varias zonas del norte del país, pero sin explotar. En el pasado, Andrés Manuel López Obrador se ha opuesto al fracking, por sus efectos ambientales.
“¿Vamos a caminar con él (el fracking)? Sí, pero estamos también analizando en la Secretaría de Energía la nueva tecnología. Todavía es muy cara, una nueva que vimos, que no tiene gran impacto ambiental”, dijo la funcionaria.