Los pasivos de la petrolera estatal Pemex crecieron en 2019 para tocar los 3.88 billones de pesos, debido en parte al incremento de 23.3% en las deudas de corto plazo a sus proveedores y a un brinco de 34.8% en el pasivo laboral de la compañía.
Los pasivos de Pemex crecen en 2019 y tocan los 3.88 billones de pesos
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La deuda financiera a largo plazo tuvo una mejora al reducirse en 8.1% para cerrar en 1.74 billones de pesos, gracias a las inyecciones de capital realizadas por el gobierno durante 2019 . Pero esta caída no logró compensar el alza en otros rubros que llevaron a los pasivos totales de la compañía que dirige Octavio Romero Oropeza.
Los pasivos de la compañía aumentaron 10% a diciembre de 2019 respecto a los 3.53 billones de pesos de 2018, viendo un alza tanto en las deudas que tiene que liquidar en el corto plazo, como en los compromisos de la empresa a largo plazo, según cifras de su reporte financiero al cuarto trimestre de 2019.
La deuda a corto plazo con proveedores sumó 184,817 millones de pesos (mdp), un incremento de 23.3%. La cifra se da en medio de reclamos de contratistas de Pemex por la falta de pagos de trabajos realizados el año pasado.
La deuda financiera a corto plazo se incrementó en 27.7%, aunque la compañía realizó operaciones financieras en enero y febrero para reducir estos montos durante 2020, y que no se ven reflejados en este reporte financiero, dijeron directivos de la empresa en una conferencia con analistas este jueves.
El pasivo a corto plazo de Pemex creció 18.7% para cerrar en 531,316 mdp en 2019.
Los pasivos a largo plazo subieron 8.7% para cerrar en 3.35 billones de pesos, debido a un incremento de 34.8% en los pasivos laborales de la compañía, que llegaron a los 1.45 billones de pesos.
El gobierno anterior absorbió parte de estos pasivos de la petrolera estatal debido a los costos crecientes que iban suponiendo dentro de sus resultados financieros cada trimestre, al tener que hacer frente a los pagos de una cantidad cada vez más grande de trabajadores que se jubilaban. Esto logró contener la masa de pasivos laborales por unos años, aunque han vuelto a subir en los últimos trimestres.
El costo neto por los beneficios a empelados, que se refiere a los pagos que tiene que erogar Pemex en cada trimestre por jubilaciones y pensiones, creció 1.3% en 2019 frente a 2018, al llegar a los 116,156 mdp, mientras que en el cuarto trimestre cayó en 0.7%.
Este rubro se aceleró 6.1% entre 2017 y 2018, y había disminuido en 2016, luego de la inyección de capital del gobierno en 2015 que frenó el alza en este indicador.