Con este despliegue de vehículos y la apertura de cinco concesionarios -tres en la Ciudad de México, uno en Monterrey y otro en Guadalajara-, el fabricante japonés buscará abrirse paso en un segmento que antes de la pandemia movía unas 65,000 unidades al año, equivalente al 4.6% de las ventas totales de vehículos en el país, según datos de Toyota.
Bob Carter, vicepresidente ejecutivo de ventas de Toyota Motor North America, y Bill Fay, vicepresidente senior de Operaciones de Toyota Motor North America, vinieron a México en abril de 2019 para hacer el anuncio.
Toyota tiene casi 19 años en México y los directivos basados en Estados Unidos dijeron que desde el arranque han seguido de cerca el tamaño del mercado premium, esperando que fuera lo suficiente representativo para garantizar un buen negocio.
“Siempre nos tomamos tiempo para lanzar la marca en un nuevo mercado. Buscamos asegurarnos de que haya un volumen suficiente para crear un buen negocio, no solo para nosotros mismos, sino también para nuestros distribuidores”, dijo Carter durante la presentación oficial de la marca, hace dos años.
Los directivos reconocieron que, aunque desde hace una década notaban un interés creciente de los consumidores mexicanos por Lexus, no veían las condiciones adecuadas para lanzar la marca en el país. Hasta ahora Toyota ha conseguido atender a estos clientes inquietos con sus modelos de alta gama, como el Camry.
Pero en los años prepandémicos, la participación de los vehículos premium, como parte de las ventas totales, incrementó casi un punto porcentual. “Esto nos hizo pensar que este era el momento correcto para arrancar la comercialización de Lexus en México”, dijo Carter.
El consumidor promedio de este tipo de vehículos tiene mayores ingresos y es menos sensible a factores negativos como el incremento de las tasas de interés o el encarecimiento de los bienes y servicios, por lo que sigue teniendo capacidad de pago y califica para el crédito.
Pero ganar una rebanada del pastel de este mercado en México no ha sido fácil para los fabricantes japoneses. Aunque en el país hay 11 marcas que compiten en el segmento, BMW, Mercedes-Benz y Audi concentran el 80% de las ventas.
Infiniti y Acura, las marcas premium de Nissan y Honda, tienen alrededor del 5% del mercado premium en México.
Pese a ello, tanto Carter como Fay confían en que los atributos que les permitieron posicionar a Lexus como uno de los cinco jugadores del mercado premium en Estados Unidos, también les ayudarán a posicionarse como “un jugador relevante” en el mercado mexicano.