Una escasez global de semiconductores, componentes clave necesarios para que los autos de hoy funcionen, ha impactado la producción de vehículos nuevos, lo que se ha traducido en una demanda que supera a la oferta de las unidades.
“Debido a la escasez de chips, hay menor inventario nuevo. Si nos fijamos en las cifras de venta de mayo, abril y marzo, son niveles saludables, superiores a los registrados en 2020, pero a partir de junio hubo una caída”, dijo Guillermo Rosales, director general adjunto de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores. "Lo que está sucediendo es que a partir de junio varias plantas armadoras tuvieron que parar de forma simultánea y eso hizo que el inventario disponible bajara notoriamente”, añade.
El inventario de automóviles nuevos disponible es aproximadamente la mitad de lo que era antes de la pandemia, según un sondeo hecho por AMDA. Pero algunas marcas incluso tienen menos de esto.
La disminución de la disponibilidad de automóviles nuevos ha ocasionado un aumento continuo en la demanda de los automóviles usados. Por supuesto, eso ya se refleja en sus precios.
Si bien este aumento de la demanda de automóviles usados debería aumentar el precio de los automóviles, según dicta la ley de la oferta y la demanda, es difícil creer que los automóviles se estén convirtiendo en activos que se aprecian. "Esto es una locura”, dice García.
Normalmente los precios de los autos usados están limitados por los nuevos. Pero como el inventario de automóviles nuevos es tan corto debido al problema de los chips, sus precios también están aumentando. Según datos de Kavak, el de los usados ha incrementado arriba de la inflación, alrededor de 9%.
"Es la tormenta perfecta que se enfrenta a la sequía perfecta: hay una gran demanda y simplemente no hay suficientes coches. Eso explica por qué los precios de los autos usados están subiendo de la forma en que lo están haciendo", dijo Alejandro Guerra, director general de Kavak.
Los especialistas coinciden en que la burbuja de autos usados durará hasta que el mercado de autos nuevos comience a recuperarse. Si el mercado se estabiliza en invierno, que es lo que se espera, esto debería también normalizar el de los usados.