Las estimaciones también apuntan a una recuperación parcial de indicadores como el del turismo nacional, que, con un flujo de 53.8 millones de viajeros, estaría a -7.5% de los niveles prepandemia. De manera similar, el consumo turístico interno se espera que esté en 225,000 millones de pesos (mdp) por debajo de 2019, una caída de 6.8%.
Para Braulio Arsuaga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), las cifras hablan de un entorno que no termina de recuperarse, y al que además se han sumado nuevos retos, como la aparición de cepas de Covid-19 que provocaron nuevas restricciones de viaje.
“Fue un año difícil, complicado, pero que sigue mostrando que el turismo es el gran aliado del gobierno para muchas cosas: combatir la pobreza, la marginación, un superávit fuerte después de afectaciones de otras industrias”, dijo en conferencia de prensa.
Arsuaga también hizo énfasis en la balanza turística, que tuvo un superávit de 14,600 mdd, superior a los déficits que tuvieron otras industrias como la petrolera, comercial y manufacturera.
Las estimaciones del Cicotur y del CNET son relativamente inferiores a las de la Secretaría de Turismo (Sectur), que para este año espera la llegada de poco más de 40 millones de turistas internacionales y el ingreso de 24,250 mdd en divisas del mismo segmento.
Del lado del Producto Interno Bruto (PIB) turístico, el Cicotur estima una caída de 17.6% en 2021 respecto a 2019, superior en más de cuatro veces a la caída del PIB nacional, de 3.8%. Para Francisco Madrid, director del Cicotur, esto responde a la debilidad del crecimiento de la economía, que llevaría a una tardía recuperación del PIB turístico.
“Probablemente se recupere para 2025 o 2026. La parte de la ecuación que es complicada es que el PIB nacional aumenta muy poco. La contribución del turismo es importante y se irá recuperando a medida que el consumo lo haga, pero con una perspectiva de crecimiento en torno al 2%, ahí tenemos el gran reto”, dijo el especialista.