En un comunicado, el órgano regulador de las telecomunicaciones precisó que la entrada de capital a Altán no modifica la modalidad de Red Compartida mayorista y que se mantienen las obligaciones para garantizar la neutralidad competitiva y evitar la influencia en esta de cualquier otro proveedor de servicio de telecomunicaciones.
La semana pasada Gerardo Soria, presidente del Instituto del Derecho de las Telecomunicaciones (IDET), aseguró que la toma del control de Altán Redes por parte del Estado Mexicano traerá problemas de competencia en el sector de telecomunicaciones, debido a que el presidente Andrés Manuel López Obrador puede darle favoritismo a esta empresa para proyectos federales y en las entidades en donde actualmente tiene poder.
Pero el IFT asegura que con la entrada del gobierno federal a la empresa no se prevé que la concentración dé poder sustancial a la empresa, ni genere barreras a la competencia en los sectores de telecomunicaciones y radiodifusión en México.
“No se advierte que la concentración atente contra el principio de que ningún prestador de servicios de telecomunicaciones tenga influencia en la operación de la Red Compartida, obligación establecida en el título de concesión correspondiente”, advierte el IFT en un comunicado.