En México se reciclan seis de cada 10 botellas de Coca-Cola, y el resto de bebidas de la marca. Y mientras el círculo de reducir, reciclar y reutilizar va tomando fuerza en México, la Industria Mexicana de Coca-Cola (IMCC) busca aumentar la recolección de residuos desde los hogares de los consumidores en medio de un alza del PET.
Para cerrar esta pinza de la circularidad con el foco en la recuperación de residuos, las embotelladoras de Coca-Cola en México, entre las que se encuentran Femsa y Arca Continental, formaron una alianza con Rappi México, para que sus repartidores se conviertan en el eslabón que conecte a los consumidores que buscan reciclar PET y otros envases hacia centros de acopio de residuos.
Como inicio de esta alianza, las empresas correrán un proyecto piloto, de septiembre a diciembre, para que los usuarios de Rappi que viven en las alcaldías Benito Juárez, Cuauhtémoc y Miguel Hidalgo tengan la posibilidad de programar la recolección de los envases de PET y otros materiales reciclables, como cartón, tetrapack, vidrio y aluminio, que serán llevados a un centro de acopio para integrarlos a la cadena de reciclaje del sistema Coca-Cola, en las plantas de PetStar y la Industria Mexicana de Reciclaje (IMER).