Yuri explica que la compra de sus boletos fue realizada por la prima de su mejor amigo, quien le ha prestado su tarjeta Citibanamex para acceder a las preventas en varias ocasiones, que se han convertido en "cuellos de botella" para acceder a los boletos.
Esto también provoca que quienes quieran asistir a un determinado evento tengan que pedir las tarjetas de la institución financiera prestadas, o, en otros casos, buscar los boletos en reventa con el riesgo de caer en fraudes. “Si no tienes tarjeta es imposible asistir a un concierto”, dice Yuri.
Boletos clonados en concierto de Bad Bunny
Hasta el momento la usuaria no ha recibido más información de Ticketmaster respecto a lo que pudo ocurrir con los boletos, que fueron utilizados antes de que ella llegara al Foro Sol. “Nunca nos dijeron la palabra 'clonado', solo nos informaron que los boletos ya habían sido utilizados y que teníamos que hacer una aclaración en la taquilla más cercana. No nos dieron una explicación de lo que pudo haber pasado”, contó a Expansión.
En la taquilla del recinto, Yuri tuvo que validar sus boletos con una identificación oficial y la foto de la tarjeta con la que se realizó la compra, pero fue hasta que la titular de la tarjeta de crédito se presentó en la taquilla que alguien del recinto le permitió entrar al concierto. Otros compradores no corrieron con la misma suerte, pues no contaban con un comprobante de la compraventa o porque el dueño del plástico no podía acudir en ese momento al recinto.
En redes sociales circulan diversas teorías sobre la "clonación de boletos". Hay quienes aseguran que detrás de este fraude pueden estar trabajadores de la compañía, mientras que otros dicen que la empresa realiza una sobreventa de entradas, “como en los vuelos”.
“No tenemos ninguna postura”, respondió el área de comunicación de Ticketmaster ante una solicitud de información respecto a cómo abordan la situación, que aqueja a varios usuarios con boletos digitales.
El empleado consultado por Expansión dijo que para el próximo concierto del puertorriqueño Bad Bunny, agendado para el 9 de diciembre, el Estadio Azteca tendrá “tolerancia cero”, para los casos de personas que lleguen al evento y su boleto haya sido previamente utilizado, como ya ocurrió en Monterrey.