La compañía ha estado operando en México desde 1997, con una inversión acumulada de más de 400 millones de dólares y empleando a más de 300 trabajadores altamente capacitados. A través de sus filiales, Enerflex es responsable del tratamiento de aproximadamente el 50% del gas natural producido costa adentro en México, en virtud de contratos con Pemex y otros productores privados de hidrocarburos.
En un intento por revertir la decisión de la Junta Especial, las filiales de Enerflex interpusieron un amparo directo ante el Primer Tribunal Colegiado de Circuito en Villahermosa, Tabasco, en marzo de 2022. Sin embargo, hasta la fecha no ha habido una resolución.
Los antecedentes del litigio laboral
Este litigio laboral se remonta a 2015, cuando un ex empleado presentó una demanda contra las subsidiarias de Enerflex y algunos empleados. En ese momento, la Junta Especial condenó a una de las filiales a pagar una indemnización al exempleado, la cual fue cumplida por la empresa. Sin embargo, en 2022, la misma Junta emitió una resolución que volvió a condenar a todas las partes demandadas a pagar una indemnización mucho mayor, basada en un salario diario exorbitante, que contradice los montos previamente establecidos.
Enerflex ha señalado que el laudo de la Junta Especial es "absurdo", ya que el salario diario del demandante, un exempleado de nivel medio, era considerablemente menor al monto ordenado por el fallo. La empresa también ha destacado la contradicción de la Junta Especial al exigir a una de sus filiales el pago de salarios caídos que ya habían sido abonados en 2017.
Formaliza solicitud de arbitraje
Enerflex ha manifestado su deseo de continuar siendo un socio a largo plazo de Pemex y otros operadores en México, contribuyendo al crecimiento continuo del mercado energético del país. Sin embargo, la incertidumbre generada por este conflicto legal pone en riesgo el futuro de Enerflex en México y podría desalentar a otros inversores extranjeros a reconsiderar sus proyectos en el país.
El 28 de febrero de 2023, Enerflex notificó a la Secretaría de Economía su intención de someter la controversia a un arbitraje de inversiones. Además, se reunió con funcionarios de la dependencia para expresar sus preocupaciones y buscar una solución a la situación. Sin embargo, dado que el conflicto aún no ha sido resuelto, la empresa ha formalizado su solicitud de arbitraje contra México con el objetivo de obtener una compensación justa por los daños sufridos en su negocio en México, de acuerdo con los compromisos internacionales adquiridos por el país.