Ah-kin Vázquez, quien previamente lideró el área comercial de la marca japonesa antes de asumir su rol como presidente y CEO de Mitsubishi Motors México, ha establecido un ambicioso objetivo de ventas de 25,000 unidades para el año fiscal, lo que significa un incremento de 11% frente a las 22,500 unidades reportadas en el año fiscal anterior. En la actualidad, los tres modelos más populares de Mitsubishi en México son la pickup L200, el monovolumen Expander y el sedán subcompacto G4.
Retos logísticos
Uno de los desafíos significativos enfrentados por Mitsubishi Motors México, y otros fabricantes automotrices que operan en el país, es el problema logístico. El volumen de importaciones provenientes de Asia a través de los puertos mexicanos del Pacífico ha superado al volumen exportado, lo que ha resultado en un cuello de botella en el transporte, causando retrasos en las entregas de las unidades a las agencias. Para abordar este desafío, Mitsubishi Motors México ha implementado varias medidas.
"Creamos un departamento interno de logística que no teníamos, porque no era necesario al principio. Pero ahora tenemos un equipo completo de logística dedicado a nuestra logística y tenemos personal en Lázaro Cárdenas para agilizar nuestras importaciones", explicó Vázquez. Estos esfuerzos han permitido a la compañía acelerar la salida de vehículos de los puertos, reducir la congestión y mejorar la eficiencia en general.
La marca japonesa actualmente opera 46 concesionarios en México y tiene planes de un crecimiento gradual y sostenible en su red de distribución. Vázquez subrayó la importancia de colaborar con los socios existentes para mejorar tanto la rentabilidad como la satisfacción del cliente, en lugar de buscar nuevos inversionistas.
“La empresa se ha propuesto el objetivo de establecer concesionarios rentables al mismo tiempo que garantiza un inventario adecuado de vehículos para respaldarlos, lo que permitiría recuperar las inversiones en un plazo de aproximadamente cinco años. En algunos casos se recupera en dos años”, detalló Vázquez.
En lo que respecta a la rentabilidad que los concesionarios pueden obtener por la venta de unidades, Vázquez reveló que el objetivo de la red de distribuidores se sitúa en torno al 6%.
¿Producción local?
La Alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, anunciada a principios de este año, tiene el potencial de generar sinergias significativas en términos de tecnología, plataformas, productos y producción. Aunque Vázquez no detalló planes inmediatos para la producción local como resultado de esta alianza, reconoció las fortalezas inherentes a la colaboración y los beneficios potenciales que puede aportar a las tres marcas.
"Sin duda, la alianza representa uno de los pilares sólidos de las tres marcas. Con el tiempo, estamos observando un aumento en la colaboración entre las tres, que seguramente incluirá intercambios de tecnología, plataformas, productos y producción. Esto es sólo el comienzo", señaló.
El Presidente y CEO de Mitsubishi Motors México adelantó que en el futuro podrían surgir colaboraciones específicas para impulsar la producción local, lo que podría conferir aún más ventajas competitivas en el mercado automotriz mexicano.
“Les diré más adelante si tengo algo en particular que pueda hacer para la producción local”, concluyó.
