Rodrigo Centeno, CEO de Nissan Mexicana, confirma que Leaf dejará de comercializarse en el mercado mexicano. No obstante, a nivel global, el modelo no será descontinuado, sino que se someterá a un rediseño y reingeniería con el objetivo de ampliar su autonomía. Mientras tanto, la empresa próximamente lanzará otro modelo e-Power. A nivel global, Nissan tiene disponibles varios modelos, algunos multipropósito (MPV), como Serena; además de Note y Qashqai. "No vamos a lanzar MPV en México, vamos a hacer otras cosas", dijo el directivo.
Producción de e-Power en México
Nissan fabrica el modelo Kicks en México, sin embargo, las versiones e-Power se importan de Tailandia, mientras que X-Trail e-Power se trae de Japón. La razón detrás de esta decisión radica en la naturaleza de la tecnología e-Power. Centeno explica que "e-Power es una tecnología de transición que democratiza la electrificación, pero al mismo tiempo, requiere inversiones significativas".
Aunque esta tecnología es efectiva para la electrificación de vehículos, implica inversiones considerables y complejidades en términos de arquitectura motriz. La estrategia de consolidar la producción de vehículos e-Power en mercados específicos, como Tailandia y Japón, tiene como objetivo alcanzar economías de escala y eficiencias operativas que permitan una entrada más agresiva en términos de precio en el mercado.
La visión de Nissan es mantener a México como un pilar fundamental en su red global de manufactura
Rodrigo Centeno, CEO de Nissan Mexicana
Pero con varios fabricantes de vehículos reconvirtiendo sus plantas mexicanas para producir modelos eléctricos surge la pregunta de si Nissan dará este paso en el corto plazo. "Ya algunos fabricantes están empezando a fabricar eléctricos en el país, y no me cabe duda de que la capacidad y la calidad de la manufactura en México puede dar soporte a esa clase de estrategias. Pero Nissan está siguiendo una ruta un tanto única en la gestión de activos y recursos", dijo Centeno.
El CEO de Nissan aclaró que la compañía no está considerando la idea de reemplazar todas sus instalaciones en todo el mundo con plantas electrificadas en el corto plazo. En cambio, la estrategia se enfoca en promover la especialización y la creación de economías de escala, donde México desempeña un papel crucial en la fabricación de vehículos con motores de combustión interna altamente eficientes. "Hemos demostrado que nuestra capacidad de producción y la calidad manufacturera en México cumplen con los estándares globales".
El directivo dijo que esta capacidad de México sigue siendo esencial en la estrategia de Nissan. Las recientes inversiones en las plantas mexicanas, con un monto total de 700 millones de dólares, están dirigidas a mejorar la productividad de las plantas, fortalecer la capacitación de su personal y continuar fomentando el desarrollo del talento local.
"Estos esfuerzos están alineados con la visión de Nissan de mantener a México como un pilar fundamental en su red global de manufactura... La convicción es que, al menos en el corto plazo, México siga produciendo motorizaciones de propulsión interna absolutamente eficientes", comentó Centeno.
"No obstante, la evolución de la industria automotriz se encamina en esa dirección (los eléctricos), lo que implicará la reconversión de todos los procesos dirigidos hacia ese objetivo en algún momento", añadió.