En el contexto de la próxima revisión del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), representantes del sector farmacéutico han sostenido acercamientos con autoridades tanto mexicanas como estadounidenses para exponer las necesidades y oportunidades de la industria en la región.
El Plan México, en la ecuación
Como parte de su estrategia para fortalecer la industria farmacéutica, el gobierno mexicano lanzó un decreto dentro del llamado Plan México, que apuesta por el desarrollo local de medicamentos y establece incentivos arancelarios.
El documento establece que, durante los procesos de compras públicas de insumos médicos para 2027 y 2028, se dará prioridad a los laboratorios que fabriquen medicamentos genéricos en territorio nacional o que estén en proceso de instalar nuevas plantas, laboratorios o centros logísticos vinculados a la cadena de suministro.
Además, el gobierno federal otorgará preferencia a las empresas que inviertan en investigación científica y desarrollo de productos innovadores o biosimilares, con el objetivo de impulsar la generación de conocimiento local. Todas estas actividades estarán exentas de aranceles, como parte de los incentivos establecidos.
Los impactos económicos de esta política podrían ser significativos. En 2024, el Producto Interno Bruto (PIB) del sector salud en México representó el 5.1% del PIB nacional, mientras que las actividades económicas directamente vinculadas a este sector contribuyeron con 4.3%, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
“La investigación clínica es la gran oportunidad que tiene la industria. Puede alcanzar los 2,000 millones de dólares, lo que demuestra que se trata de un sector poderoso y con capacidad de generar bienestar en México”, señaló Larry Rubin, director ejecutivo de la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF).
“Es una oportunidad. México es el país que menos invierte en salud, y debemos asegurarnos de que se invierta más”, agregó.
Novartis ya se puso en el mapa. La farmacéutica adelantó a Expansión que invertirá 13 millones de dólares para el desarrollo de análisis clínicos. Al respecto, Miguel Freire comenta que en el país se registran alrededor de 60 estudios clínicos en marcha en el país, en tanto evalúan la posibilidad de en el futuro instalar un centro de investigación clínica. “Queremos apostar por México como un centro de innovación”, declara.
El presidente de Novartis México explica que los estudios clínicos se gestionan de forma centralizada a nivel global. Cuando un país busca participar, la compañía realiza una evaluación de sus condiciones locales, como la calidad de la infraestructura y el nivel de sus investigadores. En el caso de México, aún no se cuenta con un espacio consolidado para este tipo de actividades, aunque ya se trabaja en su desarrollo.
Hace poco más de una década, Novartis instaló en el país uno de sus Centros Corporativos Novartis (NOCC), donde actualmente emplea a más de 1,000 personas. Desde ahí, la compañía provee productos, soluciones tecnológicas y servicios especializados para toda la región de Latinoamérica y Canadá (LACan), con áreas clave como Data, Digital & IT. Este es el sexto centro global de la firma; los otros se ubican en Praga, Dublín, Kuala Lumpur, Hyderabad y Liubliana.
En términos de desempeño, Novartis México ha reportado un crecimiento sostenido de entre 16% y 17% anual durante los últimos tres años. “Éramos una compañía de 300 millones de dólares, y este año estamos alcanzando los 500 millones en facturación”, declara el directivo.