Al menos cinco gobiernos latinoamericanos y varias empresas están considerando la venta de deuda para financiar proyectos amigables con el medio ambiente en lo que se espera sea el año más activo de la región para la emisión de los llamados bonos verdes desde 2017.
Los bonos verdes se venden como 'helado' y Latinoamérica no se lo quiere perder
Los gobiernos de México, Perú, Colombia, Costa Rica y República Dominicana están planeando ventas o trabajando para establecer el marco para emitir este año, según Sean Kidney, director ejecutivo de Climate Bonds Initiative, una organización sin fines de lucro con sede en Londres que promueve el uso de la deuda.
“Veremos una buena cantidad de acción”, dijo Kidney en una entrevista en Bogotá. “La demanda está ahí. Los inversionistas y los fondos de pensiones están muy conscientes del cambio climático. El bono verde es un algo parecido a vender helados en un día caluroso”.
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Si bien todavía hay mucha confusión acerca de lo que en realidad es “verde” cuando se trata de bonos, los administradores globales de dinero están teniendo cada vez más en cuenta la sostenibilidad al invertir. Además, los defensores dicen que, si un prestatario está usando dinero para un proyecto sostenible, es probable que sea una apuesta más segura.
Si bien el mercado de bonos verdes se ha disparado a nivel mundial, América Latina ha quedado rezagada, al representar apenas el 2% de los 205,000 millones de dólares récord vendidos el año pasado, según datos compilados por Bloomberg. Sin embargo, hay signos de que la situación está cambiando. Kidney estima que la emisión de bonos verdes de la región podría llegar a 6,000 millones de dólares este año, mientras que el Banco Interamericano de Desarrollo pronostica que las ventas podrían sumar 7,000 millones de dólares, la mayor cantidad desde un récord de 7,400 millones de dólares en 2017.
Chile ha liderado el camino en América Latina, tras emitir bonos verdes denominados en euros y dólares el mes pasado que alcanzaron algunos de sus rendimientos más bajos. Esto fue una señal para otros en la región, dijo Marilyn Ceci, directora gerente y jefa de bonos verdes de JPMorgan Chase & Co., uno de los mayores suscriptores de ventas en América Latina.
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“Cada vez que ves a un soberano emitiendo un bono verde en el mercado, recibe mucha atención en esa región y en los países vecinos”, dijo la ejecutiva. “Ciertamente, el liderazgo demostrado por Chile hará bastante eco con muchos otros en la región”.
México parece ser el primero en la fila. Contrató a BNP Paribas, Crédit Agricole CIB y Natixis para las reuniones de inversionistas a partir del lunes en las que presentará el marco de su bono soberano SDG, que se utilizaría para emitir deuda verde denominada en euros.
Probablemente, los emisores corporativos sigan el ejemplo de los soberanos, dijo Ceci.
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Kidney dijo que varios bancos, compañías de energía y empresas de construcción, entre otros, están considerando la venta de deuda verde o vinculada a la sostenibilidad. Declinó nombrarlos.
Ventas soberanas
El Ministerio de Hacienda de Colombia no ha establecido un plazo para una posible venta de bonos verdes. Perú está explorando la venta de un bono verde o vinculado a la sostenibilidad, aunque por ahora planea mantenerse fuera de los mercados internacionales de deuda, dijo el jefe de tesorería del país el mes pasado. República Dominicana ha analizado la posibilidad de vender deuda verde, pero no ha fijado una fecha, dijo una vocera de la Dirección General de Crédito Público del Ministerio de Hacienda.
El Ministerio de Economía, Industria y Comercio de Costa Rica no respondió a solicitudes de comentarios.
Si los gobiernos emiten, encontrarán mucha demanda, dijo Ceci.
“Definitivamente hay un mayor interés en América Latina por parte de los inversionistas”, dijo. “Hay una gran concentración de inversionistas en partes de Europa, incluidos los Países Bajos, el Reino Unido, Francia y Escandinavia, que buscan bonos verdes. Pero también hay mucho interés en Estados Unidos por parte de inversionistas con mucho dinero”.