América Móvil, propiedad de Carlos Slim, no solo fue la emisora del IPC que más subió en 2021, sino que es la empresa con más peso dentro del índice accionario, con 15.43%.
“América Móvil concretó transacciones durante el año lo que permitió generar una mejor expectativa y atraer inversionistas. Se destacó la venta de Tracfone Wireless, el negocio de América Móvil, en Estados Unidos, a Verizon”, dijo Karla Bajos, analista Económico de Banco Base.
Otro motivo del avance este año, es que el mercado accionario mexicano presentaba un rezago frente a mercados desarrollados.
“Habíamos visto una política monetaria laxa, con tasas de interés de hasta 4% y con tasas reales (descontando la inflación) comprimidas. Esto fue un fenómeno global por lo que los capitales se ven obligados a buscar mejores opciones”, comentó Walter Buchanan, director de inversiones en SaveNest.
A lo largo del año, 20 de las 54 emisoras más operadas por el mercado logró establecer niveles récord.
Las empresas que se deslistaron
IEnova, Santander y Lala llegaron a ser emisoras de peso en el mercado accionario mexicano, al punto de pertenecer al IPC, índice que engloba a las 35 acciones más bursátiles e importantes del país.
Las tres compañías son algunos de los nombres que decidieron, este año, deslistarse o iniciar con el proceso para dejar de cotizar en las bolsas mexicanas.
“El mercado mexicano se está enfrentando a una situación complicada. En los últimos 20 años se ha observado una contracción de 16.28% en el número de empresas listadas. La debilidad del mercado bursátil mexicano se da en un contexto de incertidumbre, lo que suele alejar a los inversionistas”, dijo Bajos.
Menos empresas cotizando impacta a los inversionistas, al tener menos posibilidades para diversificar su portafolio.
“No olvidemos que el mercado mexicano pesa menos del 1% de todas las empresas públicas del mundo, por lo que hay que tener cuidado con el home bias (cuando se invierte todo en México). Si nos diversificamos globalmente, tenemos acceso a más sectores, como tecnología, salud y otros”, comentó Buchanan. A esto se suma una exposición al tipo de cambio.
De momento, la perspectiva del IPC es alcista. Para diciembre de 2022, los analistas tienen una media de 56,446 unidades para el IPC, incluso algunos pronósticos, como Banorte y Monex, esperan 58,000 puntos, de acuerdo con la encuesta ‘Sentimiento del mercado’ realizada por la Asociación Mexicana de Instituciones Bursátiles (AMIB).
El sesgo positivo no exime al mercado de cierta presión. “El 2022 será un año con mayores retos de lo que fue 2021 debido principalmente a un endurecimiento global de la política monetaria. El retiro de estímulos a raíz de la pandemia será gradual y en 2022 será más marcado”, dijo Rodríguez.