"El sector es supercompetitivo", dijo Manuel Muehl, analista de DZ Bank. "Hay múltiples servicios -Amazon Prime, Apple Music, etc- que están dirigidos por grandes empresas estadounidenses con bolsillos muy profundos".
"(Ellos) pueden subvencionar su negocio con otros flujos de ingresos y, por tanto, no dependen del éxito de sus plataformas musicales a diferencia de las empresas 'pure-play'", agregó.
En la apertura de la Bolsa de Paría, Deezer se desplomó 35%, las acciones recortaron pérdidas y cerraron en 6 euros, una caída de 29.4%.
"Hay una duda sobre su capacidad de crecer y dar beneficios", dijo una fuente del sector.
La cotización en bolsa de Deezer fue posible gracias a su fusión con la compañía de adquisición de propósito especial (SPAC por sus siglas en inglés) I2PO. La firma está respaldada por la familia Pinault de Francia, el accionista mayoritario de Kering, propietario de Gucci, así como por el banquero de Centerview Partners, Matthieu Pigasse. El vehículo está encabezado por la ex ejecutiva de WarnerMedia Iris Knobloch.
Deezer, que compite con Spotify, tiene 9.6 millones de suscriptores y generó ingresos de 400 millones de euros en 2021. El servicio de música en streaming fue fundado en 2007 y ofrece un catálogo de más de 90 millones de canciones, además de podcasts, audiolibros y canales de radio.
Servicios como Deezer y sus rivales representan un cambio en la industria de la música que se aleja de la compra y descarga de canciones y se orienta hacia la escucha en línea de canciones almacenadas a distancia.
Con información de Reuters.