El aluminio de referencia en la Bolsa de Metales de Londres (LME) bajó un 1.7% a 2,208.50 dólares la tonelada y acumuló una pérdida de 21% en lo que va del año.
Si la Reserva Federal anuncia un aumento de su tasa de interés de 75 puntos básicos, como espera el mercado, esto podría impulsar a los metales, pero un alza de 100 puntos básicos probablemente haría caer a los precios, dijo el analista de ING Warren Patterson.
La demanda de metales se está desacelerando, pero la oferta también está restringida, dijo Patterson. "Fundamentalmente, para la mayoría de los metales, la perspectiva de precios sigue siendo favorable. Hay mucho riesgo de suministro y los inventarios son bajos".
Los altos costos de la energía han obligado a las fundiciones de aluminio europeas a reducir la capacidad de producción anual en 1.1 millones de toneladas y algunas fundiciones chinas se enfrentan al racionamiento de energía.
A pesar de esto, la producción mundial de aluminio aumentó en agosto un 3.5% interanual a 5,888 millones de toneladas, según datos del Instituto Internacional del Aluminio (IAI). Gracias a las nuevas fundiciones, la producción china alcanzó niveles récord.
El aluminio es una de las principales materias primas de industrias como la automotriz, de alimentos, farmacéutica y construcción. Una desaceleración económica afecta a estas industrias y por ende, tiene a bajar el consumo de este material.
Entre otros metales industriales, el cobre bajó un 1% a 7,681.50 dólares la tonelada, el zinc cayó 0.8% a 3,102.50 dólares, el plomo cedió un 1.6% a 1,850 dólares y el estaño retrocedió un 0.2% a 21,150 dólares. El níquel contrarrestó la tendencia al sumar 0.1% a 25,000 dólares la tonelada.
Con información de Reuters.