La mira del mercado estaba puesta además en noticias sobre el techo de la deuda estadounidense, mientras que a nivel local la atención se dirigía a la decisión de política monetaria de Banco de México (Banxico) que será divulgada el jueves.
"La expectativa de que la Fed ya no subirá la tasa de interés debilita al dólar, pues los inversionistas vuelan a otros activos que den mayor rendimiento. Con esto, es posible que en el corto plazo el peso siga apreciándose, pero existen riesgos de depreciación", indicó Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base.
Otros de los factores que influyen en la apreciación del peso son que los flujos de dólares que llegan a México, principalmente por exportaciones, remesas e inversión extranjera directa, registran aumentos récord. Además que la actual política monetaria restrictiva del Banco de México, mantiene un diferencial de 600 puntos base respecto a EU, lo que hace atractiva la inversión en pesos.
Por otro lado, la preferencia por invertir en divisas diferentes al dólar, en la cual el peso es atractivo por ser la más líquida de Latinoamérica y no presentar riesgos macroeconómicos en el corto plazo.