A principios de año, era impensable que el peso fuera a llegar a los niveles actuales: 17 unidades por dólar. Hace siete meses, las expectativas ubicaban a la moneda mexicana en un rango de entre 19 y 20 pesos por dólar, por lo que la apreciación que ha tenido la divisa local ha afectado a algunas empresas, especialmente aquellas que no tienen coberturas cambiarias.
Estas coberturas se pueden encontrar en el Mercado Mexicano de Derivados (MexDer) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) en forma de instrumentos como contratos de futuros, opciones y swaps.