Seúl ha estado cooperando íntimamente con el gobierno chino "con la creencia de que la visita del presidente Xi Jinping contribuirá a la resolución pacífica de los problemas en la península de Corea", agregó el portavoz.
Corea del Sur y China acordaron celebrar pláticas bilaterales en el G20, la próxima semana; los detalles de la reunión siguen en discusión.
China es el único aliado importante de Corea del Norte y la visita ocurre cuando hay más tensión en la península. Estados Unidos busca persuadir a Pyongyang para que abandone sus armas nucleares, en las que trabajó durante años desafiando las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
La cumbre entre Donald Trump y Kim Jong Un fracasó
El líder norcoreano había mantenido las relaciones entre ambos países en un nivel muy bajo hasta hace poco, pero la inesperada visita de Kim a China, en marzo de 2018, marcó el comienzo de una nueva era de relaciones entre Beijing y Pyongyang.
A lo largo de varios años, Kim ha purgado a varios funcionarios clave con lazos cercanos con Beijing, entre ellos su tío, Jang Song Thaek. También enfureció a China con las provocadoras pruebas nucleares y de misiles, cosa que se opone al objetivo de Beijing de desnuclearizar la península de Corea.
Sin embargo, desde esa visita a principios de 2018, Xi y Kim se han reunido cuatro veces y China incluso le prestó al joven líder norcoreano un avión para que asistiera a una cumbre con Trump en Singapur en junio de 2018. En un principio, se rumoró que el presidente de China visitaría Pyongyang ese mismo mes, pero el viaje nunca se concretó.
Con información de Reuters, EFE y CNN