Sin embargo, la vacuna de Moderna no será usada durante la primera fase de la campaña de vacunación de Reino Unido, pues la orden de 17 millones de dosis de la farmacéutica comenzará a ser entregada hasta la primavera boreal, cuando la empresa haya expandido su capacidad de manufactura.
Gran Bretaña tiene como objetivo vacunar a las personas mayores, vulnerables y trabajadores de primera línea —alrededor de 15 millones de personas— para mediados de febrero, a fin de poder relajar las estrictas medidas de confinamiento que ha tenido que imponer por el aumento de casos diarios hasta niveles récord.
Si bien la vacuna de Moderna no ayudará a cumplir con ese objetivo, apoyará en los esfuerzos por aliviar la escasez de suministros que Hancock ha calificado como un factor limitante en la campaña de vacunación.
"Esta es otra gran noticia y otro instrumento de nuestro arsenal para controlar esta horrible enfermedad", dijo este viernes el ministro de Sanidad, Matt Hancock, en un comunicado.
Reino Unido ya ha vacunado a 1.5 millones de personas. La primera vacuna que se aplicó en este país, la de Pfizer y BioNtech, indicó este viernes que parece ser efectiva para las nuevas variantes del COVID-19, de acuerdo con un estudio de elaboración propia.
El país gobernado por Boris Johnson vive una situación crítica gracias en parte a las nuevas cepas, detectadas en Reino Unido y Sudáfrica. Desde el miércoles, todos los 56 millones de habitantes de Inglaterra entraron a un tercer confinamiento nacional, el más estricto desde marzo de 2020.