El propio Navalni, arrastrando una pequeña maleta, parecía tranquilo, pero su esposa reveló que está nerviosa con lo que puede esperar al opositor a su llegada al aeropuerto moscovita de Vnúkovo en Rusia. Y es que el activista anticorrupción se encuentra en una lista de búsqueda y captura por un antiguo caso penal.
El principal opositor a Vladimir Putin y un aguerrido luchador contra la corrupción de las élites rusas, Alexéi Navalni, está decidido a seguir enfrentándose al Kremlin tras haber sobrevivido a su envenenamiento y regresó este domingo a Rusia. Solo al tocar tierra en Moscú, fue detenido nuevamente. Antes, su hermano y otros colaboradores habían sido arrestados.
De bloguero a abogado anticorrupción, de organizador de las mayores protestas desde la caída de la URSS a aspirante al Kremlin, Navalni se ha ganado a pulso en 10 años de actividad política el título de enemigo público número uno del presidente ruso.
En agosto de 2020 las autoridades dijeron basta y decidieron eliminar al político ruso con mayor tirón en Occidente. La operación secreta de los servicios especiales salió rematadamente mal y Navalni vuelve ahora a Rusia cual ave fénix para desafiar al líder ruso.
"Putin ordenó mi asesinato", dijo Navalni, de 44 años, tras recuperarse en Alemania del envenenamiento con un agente tóxico de la familia Novichok.