"Esperamos un regreso a la calma en las próximas horas o mañana (viernes), pero esto depende del cese de la agresión de las fuerzas de ocupación en Gaza y Jerusalén", había afirmado a la AFP un alto responsable de Hamás.
El enviado de la ONU para Oriente Medio, Tor Wennesland, se encontraba en Catar, donde debía reunirse con el jefe de Hamás, Ismail Haniyeh, informaron fuentes diplomáticas a la AFP.
Y el Consejo de Derechos Humanos de la ONU anunció que celebrará el 27 de mayo una reunión especial sobre la situación en los Territorios Palestinos.
Los choques se originaron por la amenaza de expulsión de familias palestinas a favor de colonos israelíes en un barrio palestino de Jerusalén Este, ocupado por Israel durante más de 50 años.
El ejército israelí bombardeó sin cesar a Gaza, un enclave densamente poblado de dos millones de habitantes y sometido a un bloqueo israelí desde hace casi 15 años.
Cinco palestinos murieron el jueves en bombardeos israelíes en la franja de Gaza, llevando a 232 el número total de palestinos muertos en este enclave desde el inicio del conflicto, según el Ministerio de Salud local.
El Comité Internacional de la Cruz Roja había estimado que "la población de Gaza e Israel necesitan urgentemente una tregua", y agregó que informó a Israel y Hamas que a partir del jueves su personal "se desplazará para responder a las necesidades urgentes".
En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el Mediterráneo Oriental afirmó el jueves que se necesitan 7 millones de dólares en los próximos seis meses para responder a la crisis sanitaria en los Territorios Palestinos.
Desde hace 10 días, han estallado también numerosos enfrentamientos con la fuerzas israelíes en varias ciudades y campos palestinos en Cisjordania, que han causado más de 25 muertos, el peor balance en este territorio desde hace años.
Con información de AFP, EFE y Reuters