“Estados Unidos ha venido señalando repetidamente que no es hostil hacia nuestro país”, dijo Kim. “Tengo mucha curiosidad de si hay gente o países que se crean esto.No hay ninguna base en sus acciones para creer que no es hostil”, añadió.
Este discurso llega tras semanas de varias pruebas de armamento en Corea del Norte, incluidos misiles de crucero de largo alcance y una supuesta arma hipersónica.
El aislado régimen comunista está sometido a múltiples sanciones internacionales por el desarrollo de un programa de armamento nuclear y misiles balísticos prohibidos por la ONU, que se ha acelerado bajo el mandato de Kim Jong-un.
Según Pyongyang, este arsenal es necesario para protegerse de una posible invasión de Estados Unidos.
En las imágenes divulgadas por medios estatales se observa a Kim frente a un gigantesco misil balístico intercontinental desvelado en un desfile militar hace un año o fumando con otros altos dirigentes.
“Debemos ser fuertes por el bien nuestros descendientes. Ante todo tenemos que ser fuertes”, añadió Kim.
Para Park Won-gon, profesor de estudios norcoreanos en la Universidad Ewha Womans de Seúl, los comentarios de Kim y la exhibición quieren justificar el programa nuclear de Pyongyang como “parte de su derecho a la autodefensa”.
“Corea del Norte celebró la exhibición a propósito para reivindicar que su programa de desarrollo armamentístico no es diferente del de otros países”, dijo a la AFP.