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¿Qué hay detrás de la crisis de abasto de fórmula láctea en Estados Unidos?

El país norteamericano vive una escasez de leche en polvo para alimentar a bebés, lo que ha sumido a muchas madres en una búsqueda desesperada y representa un nuevo reto para el gobierno de Biden.
jue 16 junio 2022 05:04 AM
Bebé gatea junto a un biberón y un montón de fórmula láctea con la bandera de EU de fondo.
El problema inició en febrero cuando la multinacional Abbott, que controla alrededor de 40% del mercado estadounidense, cerró una planta en Michigan y decidió el retiro del producto.

Si besar bebés es la foto siempre buscada por los políticos, la respuesta del presidente Joe Biden a la escasez de fórmula láctea infantil en Estados Unidos se está convirtiendo en una pesadilla política y en símbolo de un gobierno que busca apaciguar el descontento.

Con sus modales de la vieja escuela de Washington, décadas de experiencia política y diplomática y una decencia evidente, Biden ganó las elecciones de 2020 con la promesa de "curar" a la nación tras cuatro años de Donald Trump.

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Pero una crisis ha dejado en claro que esa curación no está ocurriendo y Biden es criticado con y sin razón.

La prueba principal ha sido la desarticulada respuesta a un vacío en los suministros de fórmula láctea para bebés. Los estantes de los supermercados están vacíos y los padres preocupados por la alimentación de sus pequeños.

Los bebés estadounidenses —o al menos sus padres— se unen a las filas de los que están molestos con el presidente.

¿Por qué no había fórmula láctea en las tiendas de EU?

La falta de competencia en el mercado de las fórmula láctea para bebés en Estados Unidos es una de las razones de fondo por las que este producto empezó a escasear en los estantes.

El problema inició en febrero cuando la multinacional Abbott, que controla alrededor de 40% del mercado estadounidense, cerró una planta en Michigan y decidió el retiro del producto.

La planta tuvo que suspender sus operaciones por ordenes de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), que detectó que varios de los productos estaban contaminados y causaron serias infecciones bacterianas en varios bebés que los consumieron. Cuatro de ellos tuvieron que ser hospitalizados y dos de ellos murieron.

“El problema es que no hay mucha redundancia en la producción de fórmula infantil en Estados Unidos. En otras palabras, no hay suficientes otras fábricas para tomar el relevo cuando una falla”, indicó Steven A. Abrahams, profesor de pediatría de la Universidad de Texas en Austin en un artículo para The Conversation.

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El problema de escasez es más grave en el caso de fórmulas especializadas en bebés con alergias y desordenes metabólicos, que solo se producen en la planta de Abbott.

El director general de Abbott se disculpó el 25 de mayo con las familias estadounidenses afectadas por la escasez de la leche especial para bebés, agravada por el cierre de una planta del grupo en Estados Unidos.

"Lo sentimos por todas las familias que hemos dejado atrás desde que nuestra retirada voluntaria exacerbó la escasez de leche en polvo en nuestro país", dijo el jefe del grupo, Robert Ford, en un artículo de opinión publicado en el diario Washington Post.

Los otras principales productoras son Recket Benkiser y Nestlé

Quiénes son los padres más afectados

A medida que disminuyó la oferta a los minoristas, a los padres se les presentó el escenario aparentemente improbable en la nación más rica del mundo de no tener la seguridad de alimentar a sus bebés.

Además de los bebés con alergias, la escasez de este producto afecta, sobre todo, a las madres que carecen de seguro médico y trabajan en empleos con salarios bajos y largas jornadas que no les permiten amamantar a sus hijos.

“Escuché que algunas familias manejan dos horas para encontrar tiendas que vendan fórmula. Obviamente, eso será más difícil de hacer para las familias más pobres, ya que hay costos involucrados. Del mismo modo, los padres más ricos pueden comprar fórmulas de marca de élite más caras”, dice Abrahams en su artículo.

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¿Cuál ha sido la respuesta del gobierno de Biden?

Para tranquilizar a los estadounidenses, la Casa Blanca organizó el 1 de junio una cumbre sobre el asunto en la que participaron el presidente, altos funcionarios y ejecutivos de los principales fabricantes.

La discusión tenía como objetivo resaltar la lucha de la administración para obtener más volumen del producto, incluso flexibilizando las reglas de importación y proporcionando transporte militar para fletar lo importado.

Pero el mensaje se vino abajo justo frente a las cámaras, cuando Biden trató de que los ejecutivos estuvieran de acuerdo en que nadie podría haber previsto que las medidas de Abbott conducirían a una crisis nacional.

Los ejecutivos lo contradijeron. "Desde el comienzo" se pudo prever, dijo Robert Cleveland, vicepresidente senior de Reckitt.

Estados Unidos organizó un vuelo para entregar 110,000 libras de fórmula infantil Nestlé desde Alemania a Texas el 9 de junio.

La fórmula, equivalente a aproximadamente 1.6 millones de botellas de 8 onzas, estará disponible en todo el país y se harán más anuncios de entregas de fórmula Nestlé en los próximos días, dijo.

“No vamos a descansar hasta que resolvamos este problema, y estamos trabajando para garantizar que haya fórmulas más seguras disponibles en los estantes de las tiendas en todo el país”, dijo el presidente Joe Biden en un comunicado entregado a Reuters.

Biden dijo que se traerían casi 10 millones de botellas de fórmula infantil segura para venderse en el país en las próximas dos semanas.

"Hay más trabajo por hacer, pero estamos progresando y en las últimas dos semanas, las ventas de fórmula infantil batieron récords posteriores a la pandemia", dijo.

La Casa Blanca informó que la administración de Biden organiza un nuevo un envío adicional de fórmula infantil desde Suiza a Estados Unidos para este jueves. Ese envío incluirá más de 44,000 libras o casi 20,000 kilogramos de fórmula especial de Nestlé Health Science Alfamino y Alfamino Junior.

Ese suministro "estará disponible principalmente a través de una línea de distribución que sirve a los hospitales, las empresas de salud en el hogar, y los programas de WIC en Estados Unidos", según la Casa Blanca.

¿Qué pueden hacer las familias?

Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) dan los siguientes consejos a las familias:

  • Cuando use fórmula infantil, coloque solo la cantidad que su bebé tomará en el biberón. Esto eliminará el desperdicio de su suministro.
  • No mezcle la fórmula infantil con más agua de la que indican las instrucciones. Agregar más agua puede causar desequilibrios nutricionales y provocar problemas de salud graves, como convulsiones, para su bebé.
  • No haga ni alimente a su bebé con fórmula infantil casera. Alimentar a su bebé con fórmula infantil casera puede provocarle serios problemas de salud.
  • Al elegir una fórmula infantil:

    • Puede cambiar a otra marca de fórmula infantil, incluidas las marcas de la tienda, si es necesario. La mayoría de los bebés pueden tolerar el cambio entre diferentes marcas. Si ninguna marca tiene el tipo de fórmula infantil que usa su bebé, hable con el médico de su bebe acerca de qué tipo de fórmula infantil sería la adecuada para su bebé.
    • Si compra fórmula infantil en Internet, compre solo a distribuidores y farmacias reconocidos (no a personas individuales o sitios de subastas).
  • En el caso de los bebés con necesidades especiales (alergias), los padres deberán consultar a su médico especialista para que les recomiende la mejor alternativa.

Con información de AFP y Reuters

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