Tratamiento de la viruela del mono: lo que debe saber ahora

Así se diagnostica la enfermedad

Si se sospecha de viruela del mono, los trabajadores de la salud deben recolectar una muestra adecuada y transportarla de manera segura a un laboratorio con la capacidad adecuada.

La confirmación de la viruela símica depende del tipo y la calidad de la muestra y del tipo de prueba de laboratorio. Por lo tanto, las muestras deben empaquetarse y enviarse de acuerdo con los requisitos nacionales e internacionales.

La reacción en cadena de la polimerasa (PCR) es la prueba de laboratorio preferida dada su precisión y sensibilidad. Para esto, las muestras de diagnóstico óptimas para la viruela del simio son las lesiones de la piel: el techo o el líquido de las vesículas y pústulas, y las costras secas. Cuando sea factible, la biopsia es una opción.

Las muestras de lesiones deben almacenarse en un tubo seco y estéril (sin medios de transporte viral) y mantenerse en frío.

¿Cuáles son los síntomas de la viruela del mono?

Los síntomas de la viruela símica tienden a ser leves y, en general, no ponen en peligro la vida de la mayoría, sin embargo, el dolor y la discapacidad asociados con ella pueden ser graves.

Los síntomas incluyen un sarpullido y síntomas similares a los de la gripe que pueden aparecer varias semanas después de la infección inicial. Además, la linfadenopatía o los ganglios linfáticos agrandados también aparecen después de los síntomas de las vías respiratorias superiores.

En algunos casos, es posible que las personas solo experimenten un sarpullido y ningún síntoma de gripe.

Aunque los síntomas clásicos de la viruela del simio incluyen viruela elevada o granos agrandados en todo el cuerpo, con este brote actual los síntomas pueden ser más discretos.

Las lesiones en la piel pueden estar en varias áreas del cuerpo. En el brote actual, los médicos han visto lesiones en la cara, las manos, los pies, el pecho, los genitales, las nalgas y, a veces, dentro de la boca, ya que este virus se transmite principalmente a través del contacto cercano, que incluye contacto sexual o íntimo.

¿Qué opciones de tratamiento hay disponibles?

No existen tratamientos definitivos para la viruela del simio que hayan demostrado ser eficaces en las personas que adquieren el virus; sin embargo, existen medicamentos que tienen el potencial de ser prometedores en casos graves.

​La mayoría de los casos de viruela del simio se resuelven solo con el uso de medicamentos de venta libre para la atención sintomática. Sin embargo, los casos más graves se pueden tratar con un medicamento antiviral llamado Tecovirimat o TPOXX. Aunque este medicamento está disponible, no está aprobado directamente para la viruela del simio.

Tecovirimat se aprobó en 2018 para el tratamiento de la viruela en adultos y niños, pero no se ha estudiado directamente en la viruela del simio. Los ensayos clínicos en animales han demostrado que existe cierta eficacia en el tratamiento de todas las enfermedades causadas por ortopoxvirus, que incluye la viruela del simio.

Varios médicos han informado que obtener este medicamento puede ser difícil, ya que tuvieron que pasar por un largo proceso para obtenerlo de la reserva de Estados Unidos para sus pacientes.