El sismo dejó más de 25,000 muertos en ambos países, según los últimos balances, y dañó a decenas de hospitales.
La OMS, que ya liberó 16 millones de dólares de su fondo de emergencia, dijo el martes que hasta 23 millones de personas podrían verse afectadas.
Pero la organización eleva ahora la cifra a 26 millones, con 15 millones en Turquía y cerca de 11 millones en Siria, devastada por una guerra.
De esta cifra, más de cinco millones de personas son consideradas como particularmente vulnerables, entre ellas 350,000 ancianos y más de 1.4 millones de niños.
La OMS calcula que en Turquía, donde se derrumbaron más de 4,000 edificios, 15 hospitales sufrieron daños parciales o graves.