La fuente afirmó que, aunque Teherán era consciente de que se estaba preparando una operación importante, no se habló de ella en ninguna de las salas de operaciones conjuntas en las que participaban Hamás, los dirigentes palestinos, Irán y Hezbolá, militantes libaneses respaldados por la república islámica.
"Era un círculo muy cerrado", dijo la fuente.
#QuéPasóCon ISRAEL y PALESTINA, explicación y resumen del conflicto
La máxima autoridad iraní, el ayatolá Alí Jamenei, afirmó el martes que Teherán no participó en el ataque contra Israel. Washington ha dicho que, aunque sea cómplice, no dispone de información o pruebas que apunten a la participación directa de Irán en los atentados.
El plan concebido por Deif supuso un largo esfuerzo de engaño. Se hizo creer a Israel que Hamás, enemigo jurado de Israel, no estaba interesado en iniciar un conflicto y se centraba en cambio en el desarrollo económico de Gaza, donde el movimiento gobierna.
Pero mientras Israel empezaba a ofrecer incentivos económicos a los trabajadores gazatíes, los combatientes del grupo se entrenaban y adiestraban, a menudo a la vista de los militares israelíes, dijo una fuente cercana a Hamás.
"Llevamos dos años preparándonos para esta batalla", dijo Ali Baraka, responsable de relaciones exteriores de Hamás.
Hablando con voz tranquila, Deif dijo en su grabación que Hamás había advertido repetidamente a Israel que pusiera fin a sus crímenes contra los palestinos, que liberara a los presos, de los que dijo que sufrían abusos y torturas, y que detuviera las expropiaciones de tierras palestinas.