Patrick Gaspard, presidente del Center for American Progress, un grupo de expertos de izquierda, calificó el informe de decepcionante porque, según él, ignora "pruebas abrumadoras".
"Cuesta creer que la administración vea lo que está sucediendo en Gaza y no llegue a la conclusión de que Israel ha violado los términos para el uso de armas estadounidenses", opinó.
El apoyo continúa
El gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, informó el martes al Congreso que va a entregar un paquete de armas valorado en 1,000 millones de dólares a Israel, informaron fuentes oficiales a la AFP.
Un asesor del Capitolio dijo que el valor de las armas suministradas a Israel ascendían a alrededor de 1,000 millones de dólares.
Las armas saldrían de un importante paquete por 95,000 millones de dólares aprobado recientemente por el Congreso en apoyo a la defensa de Ucrania, Israel y Taiwán, y la administración Biden ha dicho en repetidas ocasiones que planeaba seguir adelante y apropiarse de los fondos mediante compras a fabricantes estadounidenses.
El acuerdo se produce una semana después de que Biden advirtiera que podría retener bombas y proyectiles de artillería a Israel si el primer ministro, Benjamin Netanyahu, continuaba con un asalto a Rafah, desafiando las advertencias estadounidenses.
Washington también confirmó la semana pasada que por primera vez había detenido un envío que incluye bombas de 2,000 libras, por temor a que se utilicen con riesgos devastadores para la población civil de Rafah, donde se han refugiado más de un millón de palestinos tras medio año de guerra.
El Congreso aún podría bloquear la venta de armas a Israel, con miembros de izquierda del Partido Demócrata de Biden indignados por el número de víctimas civiles en la guerra de Gaza.
Pero el paquete global fue aprobado a pesar de la oposición de la izquierda, y el rival Partido Republicano apoyó casi unánimemente la venta de armas a Israel.