El 19 de agosto, Trump dijo que podría recurrir a Musk como un miembro de su gabinete o un asesor, “si él aceptara”, pero días después trató de minimizar la posibilidad de que el presidente ejecutivo de Tesla se incorpore a su gobierno, aunque podría ser un consultor útil.
"Quiere involucrarse, pero mira, está dirigiendo grandes negocios y todo eso... así que realmente no puede" estar en el gabinete, dijo Trump en el Shawn Ryan Show la semana pasada. "Él puede, como dice la expresión, consultar con el país y darte algunas ideas muy buenas”.
Además de Musk, los asesores de Trump consideran otros nombres, para minimizar la influencia que el dueño de Space X podría tener en la comisión, Algunos de estos nombre son Fred Smith, exCEO de FedEx, y Robert Nardelli, exCEO de Dome Depot, dijeron al Post dos personas familiarizadas con el asunto que hablaron bajo condición de anonimato.
Las compañías de Musk ya cuentan con una importante porción del gasto federal estadounidense, por lo que su posible involucramiento en el gobierno puede causar varios conflictos de interés.
Por ejemplo, Tesla ha recibido 36 millones de dólares en fondos federales para instalar por lo menos 328 estaciones de carga para vehículo eléctricos, de acuerdo don la firma de investigación Atlas Public Society.
Además Space X ganó un contrato con la NASA en 2021 por 4,400 millones de dólares para construir un sistema de aterrizaje humano para las misiones Artemis a la Luna, de los cuáles ya ha recibido 2,200 millones de dólares.