6 de diciembre: miles huyen mientras los rebeldes avanzan a Homs
Miles de personas huyeron de la ciudad de Homs, en el centro de Siria, durante la noche del 6 de diciembre y la mañana del 7 de diciembre, mientras las fuerzas rebeldes trataban de impulsar su ofensiva relámpago contra las fuerzas gubernamentales más al sur.
El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, un observatorio de la guerra con sede en Reino Unido, dijo que miles de personas habían comenzado a huir el jueves por la noche hacia las regiones costeras occidentales de Siria, un bastión del Gobierno. Un residente de la zona costera dijo que miles de personas habían comenzado a llegar allí desde Homs temiendo el rápido avance de los rebeldes.
7 de diciembre: los rebeldes toman Homs y Deera
Las fuerzas gubernamentales sirias abandonaron el sábado la ciudad de Homs tras menos de un día de combates, dejando los 24 años de gobierno del presidente Bashar al-Assad pendiendo de un hilo.
El líder insurgente más poderoso, Abu Mohammed al-Golani, afirmó en un comunicado que los rebeldes estaban a punto de tomar todo el país y que "el fin del régimen criminal está cerca".
Los grupos locales en la provincia de Deraa, en el sur de Siria y colindante con Jordania, logran controlar la capital regional, cuna de las revueltas en 2011 de la Primavera Árabe de 2011, mientras grupos drusos dominan la ciudad de Al Sueida, capital de la provincia homónima al este de Deraa.
8 de diciembre: Al Asad deja el poder, los rebeldes entran a Damasco
Los rebeldes tomaron el domingo sin oposición la capital de Siria, Damasco, tras un avance relámpago que hizo huir a Rusia al presidente Bashar al Assad tras 13 años de guerra civil y seis décadas de gobierno autocrático de su familia.
En uno de los mayores puntos de inflexión para Oriente Medio en generaciones, la caída del gobierno de Assad acabó con un bastión desde el que Irán y Rusia ejercían influencia en todo el mundo árabe. Moscú le dio asilo a él y a su familia, según los medios estatales rusos.