Ambas elecciones enfrentan a demócratas centristas contra republicanos alineados con el movimiento "Make America Great Again" (MAGA) de Trump, y podrían indicar si los votantes moderados han aceptado la agenda radical de recortes del presidente o si planean darle un fuerte revés a su partido el próximo año.
Trump ha arrasado con el gobierno desde su regreso al cargo en enero, cerrando agencias enteras y recortando un estimado de 200,000 empleos, incluso antes de la parálisis presupuestaria (“shutdown”), que alcanzó un récord de 35 días este martes.
"Si los demócratas arrasan —o incluso ganan— en Virginia y superan por poco Nueva Jersey, eso indicaría que los suburbios no han perdonado al MAGA", dijo a AFP Michael Ashley Schulman, analista financiero y político radicado en California.
Virginia elegirá a su primera mujer gobernadora
La elección en Virginia, que es segunda después de California en el tamaño de su fuerza laboral federal, será un enfrentamiento histórico entre dos mujeres que compiten por convertirse en la primera gobernadora del estado.
La demócrata Abigail Spanberger, exagente de la CIA y congresista durante tres mandatos, se enfrenta a la vicegobernadora republicana Winsome Earle-Sears, veterana de la Marina y firme aliada de Trump.
Las encuestas muestran que Spanberger, quien ha recurrido a sus credenciales en seguridad nacional y se ha presentado como un bastión contra la agresiva reducción del gobierno impulsada por Trump, mantiene una ventaja constante de unos siete puntos.
En sus discursos de campaña prometió ser "una gobernadora que dará la cara" por los miles de trabajadores federales despedidos por el Departamento de Eficiencia Gubernamental de Trump.
Earle-Sears inició su campaña con temas candentes para entusiasmar a los conservadores, reflejando la estrategia del gobernador saliente Glenn Youngkin al centrarse en cuestiones de guerra cultural como los atletas transgénero y el aborto.