"Había riesgo real para mi vida"
Machado pasó a la clandestinidad después de los comicios presidenciales de 2024. Estos resultados electorales no fueron reconocidos por Estados Unidos, la Unión Europea y varios países de Latinoamérica.
La líder opositora, que estaba inhabilitada, sostiene que Maduro le robó las elecciones a su candidato, González Urrutia, y publicó copias de los votos emitidos en las máquinas de votación como prueba del fraude.
Antes de su aparición en Oslo no había sido vista en público desde una protesta en Caracas contra la investidura de Maduro para su tercer mandato, en enero de 2025.
A riesgo de ser declarada fugitiva en su país, Machado dejó Venezuela en unas condiciones sobre las que ha mantenido el misterio.
Según Bryan Stern, un excombatiente estadounidense que fundó una empresa para sacar a extranjeros de zonas peligrosas, su salida del país sudamericano fue posible gracias a una rocambolesca operación, denominada "Dinamita Dorada".
Según contó Stern, Machado dejó Caracas disfrazada y con una peluca, y se dirigió a una playa del norte del país.
Ya en la playa, la embarcación en la que debía escapar —un viejo pesquero elegido para no levantar sospechas ni exponerse a los bombardeos estadounidenses en el mar Caribe contra buques que, según Washington, transportan drogas— estaba averiado.
Al final logró embarcar, pero el GPS no funcionaba. Entumecida de frío y empapada, pasó a otro barco, en el que se encontraba Bryan Stern. En este navío logró llegar a Curazao donde abordó un avión.
"Hubo momentos que sentí que había riesgo real para mi vida, y que fue un momento también muy espiritual porque, al final, simplemente sentí que estaba en las manos de Dios", declaró Machado el viernes en Oslo.