Ahora, si esto te ocurre con una persona en particular, es importante que le expreses tu molestia de manera asertiva (firme y sin agredir) y por ningún motivo guardes silencio bajo el argumento de que quieres llevar la fiesta en paz.
Los psicólogos decimos “lo que no se expresa, se actúa” así que, si lo guardas, tarde o temprano explotarás con actitudes negativas hacia esa persona o peor aún, con quien ni la debe ni la teme, como tu pareja o tus hijos.
Si en tu negocio se han establecido valores, una misión o ya de perdida un reglamento, hazle ver a la persona cómo su actitud recurrente de no entregar a tiempo va en contra de los valores o la misión de la empresa.
¿Tu tarea es aprender a usar una nueva herramienta digital y te resistes a ello?
Te entiendo. Una clienta me decía. “Sé que tengo que usar nuevas herramientas digitales para la comunicación con mi equipo, pero sólo de pensar el tiempo que tengo que destinar para aprender a usarlas, hace que tome posición fetal mientras lloro abrazando mi WhatsApp. Sí, probablemente no es el sistema más efectivo para el seguimiento de proyectos, pero es el que sé manejar y ya no tengo que invertir energía en entenderle”.
Mi clienta llegó a una conclusión “odio el cambio, pero odio más fracasar”. Hay dos cosas que ella hizo y te pueden servir:
1. Cambia tu entorno físico y tus rutinas. Los cambios en otros ámbitos de tu vida pueden motivarte a actuar.
2. Pide ayuda a una persona que ya conozca la plataforma y que sobre todo tenga paciencia para explicar. Aparta una tarde completa para familiarizarte con la herramienta. Conforme vayas practicando te darás cuenta que esa resistencia se irá desvaneciendo. Afortunadamente también hay infinidad de tutoriales en internet para aprender a usar las herramientas.
Una ganancia secundaria es que una vez que te habitúes a la nueva plataforma, te sentirás competente y con más orgullo de ti. Recuerda que el logro de metas es un componente que genera felicidad.
Cuando dejas de posponer te responsabilizas de tus tareas y obtienes algo muy valioso en estos tiempos: calma mental. Dejar de posponer es difícil, pero la satisfacción personal de lograr tus metas y poner fin a ese mal hábito bien vale todo tu esfuerzo por cambiar.
Nota del editor: Adriana Castro tiene una especialidad en Psicología de la Creatividad por la Universidad Autónoma de Barcelona. Es fundadora de Call to Action: Empresas felices. Síguela en Facebook (adrianacastromx). Las opiniones en esta columna pertenecen exclusivamente a la autora.
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